CIUDAD DE MEXICO, 25 de octubre (ZOCALO).- El Crimen Organizado no se combate únicamente “con balazos en la calle”, existen maneras más inteligentes para hacerlo, como cortar su movilidad para operar dentro de las prisiones a través del combate a la corrupción y el fortalecimiento de los estándares de calidad, afirmó el Director en México de la Oficina de Procuración de Justicia Internacional y Antinarcóticos del Departamento de Estado, de la Embajada de la Unión Americana, Alberto Rodríguez.
El funcionario estadounidense afirmó que se debe combatir al crimen organizado desde los centros de reclusión.
“A lo largo de los años hemos aprendido que el Crimen Organizado no sólo se combate con balazos en la calle. Hay maneras más inteligentes para hacerlo. Un buen comienzo puede ser cortar su movilidad para operar dentro de las prisiones a través de golpes combatiendo la corrupción y fortaleciendo los estándares de calidad”, expresó.
Señaló que esto es precisamente lo que está trabajando Estados Unidos con México.
“Esfuerzos como estos nos enseñan que podemos combatir la actividad criminal dentro de una prisión con otras herramientas antes de recurrir al uso de la fuerza”, indicó Rodríguez.
Al participar en la entrega de certificaciones a 146 funcionarios de sistemas penitenciarios estatales en materia de “Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos”, Alberto Rodríguez destacó que en la actualidad es necesario apostar a la reinserción social como un modelo que no sólo beneficia a las persona privadas de la libertad, sino a toda la sociedad en su conjunto.
“No podemos ignorar el verdadero significado de la reinserción social, porque reintegrar a una persona es la principal función y responsabilidad de un sistema penitenciario y sociedad; si fallan ellos, fallamos todos.
“De nada nos sirve tener a gente encerrada en la cárcel… si no hay un proceso de aprendizaje, de readaptación, un cambio de mentalidad”, resaltó el diplomático y enfatizó en que para que lo anterior sea posible, la garantía del derecho humano es fundamental.