
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, reconoció la labor humanitaria de bomberos y rescatistas mexicanos enviados desde Acuña, Coahuila, para apoyar en las tareas de búsqueda y rescate en Texas, estado que ha sido severamente afectado por inundaciones que han cobrado la vida de al menos 109 personas, según autoridades locales.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum subrayó que este gesto reafirma la esencia solidaria del pueblo mexicano.
“La fraternidad es lo que nos caracteriza como nación. Somos un pueblo que le da la mano al que sufre, al que se queda atrás”, expresó.
La mandataria felicitó al alcalde de Acuña, Emilio de Hoyos Montemayor, y al gobernador de Coahuila, Manolo Jiménez, por su rápida reacción ante la tragedia ocurrida en la región de Hill Country, a las afueras de San Antonio.

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Las inundaciones sorprendieron a miles en la víspera del feriado del 4 de julio, dejando devastación en zonas donde se preparaban celebraciones al aire libre.
El gesto de México fue ampliamente reconocido por las autoridades estadounidenses. La portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce, agradeció públicamente la colaboración: “Estamos profundamente agradecidos con nuestros amigos en México, quienes han enviado valientes bomberos y rescatistas para apoyar los esfuerzos en Kerrville, Texas”.
Sheinbaum también lamentó que algunos sectores critiquen este tipo de ayuda internacional, pero recalcó que su gobierno seguirá actuando con principios humanistas. “La solidaridad no conoce fronteras.
Esta es una muestra de que la cooperación entre naciones es posible, necesaria y profundamente humana”, concluyó.
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