Por Hugo Carbajal Aguilar
Más de 40 mujeres resultaron electas en Chiapas para ocupar diferentes cargos (10 diputaciones y 36 regidurías) pero han renunciado a su puesto con el fin de dejárselo a los varones. Este abuso de los partidos machitos está siendo ya motivo de escándalo nacional. Los partidos se rasgan las vestiduras y se manifiestan absolutamente inocentes, el INE dice que tomará decisiones muy serias en torno a esto y quién más quién menos se declara indignado por este abuso. La farsa crece y el poder aparece como una herramienta fundamental que acaba con todo rasgo de humanidad pues convierte al implicado en su búsqueda en un auténtico pelele sin decoro y sin dignidad.
De ahí que sin mayor comentario les comparto una reflexión nacida de la lectura de un interesante texto. Es una Reseña elaborada en clase de Desarrollo Sustentable que generó una muy interesante reflexión. Alondra Sánchez, estudiante de Ing. Industrial del Tec de Zacatepec nos la comparte junto con sus compañeritas, parte de este estudio.
La tesis que se muestra en el libro demuestra que el origen histórico del feminismo en México es plenamente consecuente con el proceso de constitución de la identidad cultural del México moderno y así ser útil a la reflexión cultural de México en sus procesos de identidad y diferenciación frente a las culturas, y ante la constitución de nuevos proyectos de emancipación de las mujeres. En esta tesis se muestran pensamientos de cuatro destacadas mujeres durante el siglo XX: Antonieta Rivas Mercado, Nahui Olin, Gabriela Mistral y Concha Michel.
Considero de gran importancia tener conocimiento del origen del feminismo y la trayectoria que ha tenido, ya que actualmente sigue siendo un tema de gran relevancia no sólo en México, sino en el mundo.
Cabe recalcar que el feminismo no es lucha contra el hombre, como se ha considerado, sino una lucha para que tanto hombres como mujeres tengan oportunidades de manera equitativa, ya que a lo largo del tiempo las mujeres han sido denigradas por el simple hecho de ser mujeres, a tal grado de pensar que lo que recibimos no lo merecemos y así perdemos nuestra identidad, perdemos nuestro sentido de sí.
(Esto es muy importante destacarlo porque la actitud feminista no es una respuesta al machismo, una mecánica respuesta. Implica toda una reflexión histórica y antropológica que deberíamos someter a debate permanente con el propósito de ir abriendo brecha en todos los ámbitos de nuestro pueblo. Obsérvese que no sólo en comunidades originarias sino en las grandes ciudades, pueblos y centros urbanos con más oportunidad de cultivarse aún persiste esa idea).
Me es importante conocer el tema ya que soy mujer y me doy cuenta de cómo está la situación actualmente, el hecho de ser mujer y comportarme o vestirme de la manera que más me agrade, no le da derecho a nadie de que me acose, viole o asesine, sí, por el simple hecho de ser mujer. Esto no quiere decir que los varones no sufran violencia, ya que es una de las causas más frecuentes de muertes en hombres; pero lo que busca el feminismo es que las mujeres sean tomadas en cuenta, no sean denigradas y sean tratadas con respeto, tomando conciencia de las mujeres como grupo humano o colectivo buscando la liberación de la mujer con todas las transformaciones que puedan existir en sociedad.
Una idea equivocada del feminismo, es que se piensa que una mujer es feminista porque se cree superior a los varones o incluso que los odia, cuando no es así, ya que una feminista busca la igualdad y, de igual manera busca terminar con el machismo que posiblemente demuestre debilidad y sólo genere violencia. Es importante mencionar que las mujeres no forman parte únicamente del feminismo, sino también los hombres pueden ser partícipes de él. Recordando el primer congreso feminista en Yucatán, en donde los resultados no fueron avances significativos en la vida de la mujer pero sí importante ya que fue la que le dio paso a los inicios de la conciencia feminista en México, no fue iniciativa de las mujeres sino de un hombre llamado Salvador Alvarado. Destacando que después de estos congresos, una de las consecuencias fue la organización de movimientos de mujeres y que se fortaleció con el Frente Unico Pro derechos de la Mujer.
Las feministas de principios de siglo XX dotaron al feminismo mexicano de un sentido de identidad nacional, que actualmente se mantiene.
En la actualidad, siento que las mujeres somos más fuertes, tenemos más decisión y no optamos por callar en caso de sufrir acoso o violencia, cada mujer levanta la voz y trata de ser escuchada; aunque sí, es difícil terminar con el machismo o incluso con algunas desigualdades en pleno siglo XXI. Sin embargo, el feminismo es una lucha que seguirá hasta conseguir el gran objetivo: recuperar el sentido de sí, reconocer que somos cultura y que somos parte del género que debe representar dignamente el ser humano.
Ya somos parte de un todo, de una cultura, una religión, una educación, política y de diversos ámbitos en los que se vive actualmente. Aunque ya existan más oportunidades para la mujer, no deja de existir el odio, envidia, machismo, hacia y contra ella; llegando incluso al extremo de que existan casos de feminicidios en México. Las cifras son alarmantes, hay más de siete mujeres que mueren cada día y en los últimos 10 años más de 23,800 mujeres han sido asesinadas y es aún más preocupante que de acuerdo a la ONU sólo el 10% de los casos ha recibido una sentencia condenatoria. Por lo que considero importante involucrar tanto a hombres como mujeres en prácticas del feminismo. Como anteriormente se mencionó éste busca una equidad entre ambos géneros.
Se mencionó que algunas feministas contemporáneas no sienten envidia del hombre, sino amor insuficiente a ellas mismas, opino que actualmente sí existen mujeres que no sienten amor propio y se dejan someter por el género masculino y ya no debería ser así. En la actualidad una feminista busca:
*La defensa de nuestros derechos: recordando que defienden la igualdad de derechos entre hombres y mujeres.
*Igualdad social.
*Vestirnos como queramos: para que no se nos acuse de provocar a terceras personas o incluso de exhibicionismo.
*Hombres que se unan al movimiento feminista.
*Defensa de nuestros derechos reproductivos.
*Justo reparto de labores domésticas.
*La lucha contra la violencia machista en todas sus manifestaciones.
Las mujeres seguimos en busca de nuestro sentido de sí porque ser mujer es un orgullo. Por lo que recomendaría que cada mujer que tenga la oportunidad lea la tesis que se encuentra en este libro y se dé cuenta de que el feminismo no es cosa de unos cuantos años, sino de muchos. Y por tanto se dé cuenta de lo que han pasado diversas mujeres por luchar para conseguir la igualdad que tanto hace falta, por encontrar ese sentido de sí que nos pertenece.
Hasta ahí la reflexión.
Si estamos en el umbral de un nuevo régimen (eso esperamos y proponemos) que pretende edificar una nueva sociedad ya va siendo hora de cumplir compromisos. No se trata de sentarnos a esperar sino de dar testimonio de nuestras convicciones, con todo lo que esto implique. (“El sentido de Sí” -Un ensayo sobre el feminismo y la cultura en México-. Rubí de María Gómez Campos. S. XXI).