Hoy vamos a hablar de cuáles son las entidades encargadas de informar y sobre todo de tomar las decisiones finales ante la emergencia de afectación de un ciclón tropical, porque esto se ha prestado a muchas confusiones, y a veces las decisiones finales recaen en las instituciones o entidades que no deberían de tomar ese tipo de decisiones.
Mucho se cuestionó durante el paso de “Cristóbal” por la Península de Yucatán qué sucedió con la Alerta Amarilla, que nunca se emitió, sino que pasamos directo a Alerta Naranja. En esa ocasión, el Cenapred fue la institución federal que estuvo tomando el control de las alertas, y no sabemos si hubo confusión o qué sucedió realmente. Lo que sí esperamos es que las autoridades de Protección Civil de los tres estados de la Península habrán tomado nota de este detalle tan importante para que en adelante se tome una decisión más de acuerdo con el manual.
No ahondaré en la parte política del funcionamiento del semáforo de alertas porque no me corresponde, pero de que las autoridades federales no lo llevaron bien, es una realidad. Afortunadamente, “Cristóbal” no fue un gran huracán categoría 5, si no, desconocemos que hubiera pasado.
Una vez que comienza la temporada de Ciclones Tropicales, el 1 de junio, la entidad oficial de seguimiento sobre el comportamiento de estos sistemas es el Centro Nacional de Huracanes (CNH) con sede en Miami, Florida, EE.UU., a nadie más. Y ahí acudirán todos los representantes de cada país de la cuenca del Atlántico, Golfo de México y Mar Caribe para proveerse de información acerca de los ciclones.
En México, la entidad representante ante la Organización Meteorológica Mundial es el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), ellos difundirán qué sucede mediante la emisión de boletines, basados en los avisos del CNH; sin embargo, en México hay instituciones integradas con muy buenos meteorólogos, capacitados y entrenados en el extranjero, que apoyan para dar mayor cobertura a los boletines que van emitiendo tanto el SNH como el SMN.
También hay páginas de meteorólogos aficionados que, de buena fe y sin recibir nada a cambio, dan cobertura a este tipo de fenómenos atmosféricos basados en la información oficial que se va emitiendo. A los que siguen estas páginas se les recomienda que traten de ubicar quiénes son veraces y oportunos en su información y quiénes solo se dedican a espantar y dar mala información, pues eso a veces sólo complica más las cosas.
Además, hay mucha gente en las redes sociales a la que le fascina esta área, el problema es que no tienen el mínimo conocimiento de lo que significa interpretar la información y dan malas apreciaciones de la misma, y en vez de ayudar sólo contribuyen a dar falsos testimonios con opiniones muy lejos de la realidad.
Por otra parte están los llamados medios de comunicación sensacionalistas y amarillistas, que sólo buscan llamar la atención con noticias fantasiosas acerca de lo que está ocurriendo o está por ocurrir, que solamente aumentan la confusión y crean caos; desgraciadamente, la población hace mucho eco a la mala información, y todo el trabajo que realizan las entidades oficiales del panorama real del ciclón tropical se va al traste, y las decisiones erróneas que asume la población son de las más equivocadas que se puedan imaginar, como sucedió con “Cristóbal” en el año 2020.
Finalmente, déjenme decirles que es muy importante que la población se mantenga prevenida, que no baje la guardia, sobre todo ahora que este mes de junio todo indica que no se presentará ninguna formación en la cuenca del Atlántico, algo que no ocurría en muchos años, lo cual aumentara el relajamiento de la población.