De la Redacción
TULUM, 5 de marzo.- Se prenden los focos rojos por la inseguridad en el municipio de Tulum, tras balacera registrada entre bandas rivales del crimen organizado, la noche del lunes, en pleno corazón turístico, dejando de manifiesto la poca efectividad de la policía coordinada implementada por el secretario de Seguridad Pública Jesús Alberto Capella Ibarra.
Hechos registrados en la calle Centauro entre avenida Tulum y calle Andrómeda, punto en donde la droga corre a raudales, tan es así que en el año pasado en el mes de agosto, fue detenido por autoridades policíacas un sujeto de nombre Erick “N”, con más de 112 dosis y, el pasado 27 de febrero, otro con 60 dosis, ambos usaban el sitio para la venta de droga; sin embargo, los dos están libres.
La inseguridad es palpable, a pesar que desde hace ya algunos meses se cuenta con la presencia de la Policía Estatal en el noveno municipio, en donde las ejecuciones entre bandas rivales no son ajenas, los robos a casa habitación, asaltos a transeúntes, derechos de piso, entre otros delitos que laceran a los tulumnenses.
La incertidumbre podría estar provocando que la iniciativa privada, en muchos casos extranjeros, estén bajando las cortinas de los restaurantes de la zona turística del centro de Tulum, tras la balacera entre bandas delincuenciales ocurrida la noche del lunes.
Hora en que la calle Centauro se encontraba muy concurrida por turistas extranjeros, que no sólo acuden a los restaurantes, sino a cafés y desde luego tiendas de artesanías tal y como suele suceder en ese tramo, luego que los mismos empresarios del lugar han impulsado el sitio a través de eventos organizados por los mismos.
Actualmente es una de las más concurridas, por ello, el grupo criminal lo usa para la venta de estupefacientes, que descaradamente ofrecen a los turistas, acto que es sabido por la corporación policíaca tanto estatal como municipal, a pesar de ello, no han tomado acciones para reforzar ese lugar, que fue escena de una balacera entre grupos rivales por la disputa de la plaza, provocando pánico entre los turistas que previo a ello disfrutaban de una suculenta cena, por lo que huían despavoridos del lugar, otros se refugiaron en los mismos locales, llevándose una amarga experiencia del sitio y no fue hasta que notaron la presencia de la policía, cuando finalmente empezaron a salir de estos y los propietarios apresuradamente procedieron a bajar sus cortinas.
Incluso, fue el pasado 27 de febrero cuando detuvieron a un sujeto con 60 dosis entre cocaína y marihuana, así como dinero, que fue puesto a disposición de la Fiscalía, pero que igual, fue liberado como ocurrió el año pasado con uno a quien le aseguraron 112 dosis de droga, en consecuencia saben del problema en el lugar.
La presencia de la policía la noche del lunes ante estos hechos, igual provocó enojo entre los que presenciaban el fatal suceso, al manifestar que para qué su presencia, luego de los hechos, cuando se supone que están para la prevención del delito.
Estas ejecuciones que ya alcanzan la zona turística, demuestran que la policía coordinada implementada por el secretario de Seguridad Pública, Capella Ibarra, es un fracaso.