De la Redacción
En un ataque a balazos contra un lavadero de autos, registrado la tarde de este jueves en la Región 237, un hombre y una mujer resultaron gravemente heridos por las balas, el hombre del cual fue identificado como José Angel, agonizando fue ingresado al hospital, la mujer identificada como Claudia, su estado de salud también era reportado como delicado.
En el lavadero quedaron más de cinco casquillos percutidos calibre 9 milímetros, y el responsable de acuerdo a testigos fue un hombre quien disparó de manera directa contra la pareja, quienes presentaban disparos a la altura del cuello y rostro; no hay detenidos.
Como José Angel de 25 años de edad, Claudia “N”, fueron identificadas las víctimas que resultaron heridas por los disparos la tarde de este jueves, al encontrarse en la Región 237, de acuerdo a testigos un solitario sicario llegó a pie y abrió fuego hacia el interior de un lavadero de autos, logrando herir a las personas, un hombre y una mujer, que se encontraban al interior.
Tras el reporte que ingresó al número de emergencias 911, policías municipales y ministeriales se dirigieron hasta la avenida prolongación Tulum Región 237, al interior del lavadero de autos, se encontraban un hombre y una mujer heridos, el hombre aparentemente ya sin vida estaba sentado en una silla, mientras que la mujer permanecía tendida en el suelo, de inmediato las autoridades solicitaron la intervención de unidades médicas, por lo que dos ambulancias de la Cruz Roja se dirigieron hasta el lugar antes mencionado, una vez en el lugar los paramédicos, sin perder tiempo trasladaron a la pareja herida hasta un hospital, el hombre llegando al nosocomio entró en paro cardiaco, por lo que fue asistido por los paramédicos mientras lo ingresaban, tiempo después se reportó que no podía ser ingresado a quirófano para ser intervenido por los impactos que presentaba principalmente en el rostro, al ser reportado su estado como grave, por lo que médicos tratarían de estabilizarlo antes de someterlo a cualquier cirugía.
De acuerdo a los reportes el hombre presentaba disparos a la altura del cuello, tórax y rostro, la mujer a la altura del tórax y en la cara, al parecer no es la primera vez que sufrían un atentado y esta vez el sicario tenía la orden de que no quedara en el intento, por lo cual les apuntó a la altura de la cabeza.
En el lugar donde ocurrieron los hechos, peritos criminalistas de la Vicefiscalía General de Justicia aseguraron seis casquillos percutidos calibre 9 milímetros, los cuales servirían como evidencia; hasta el cierre de esta edición el estado de salud de ambos heridos era reportado como delicado.