Por Salvador Canto
Geovany y su familia están pasando por uno de los momentos más difíciles de su vida; el COVID-19 entró a su cuerpo y no fue por no cumplir la cuarentena, el contagio pudo llegar en el camión que todos los días abordaba para ir a su trabajo ubicado en un hotel de la zona turística de Cancún, pues el sitio no paró labores.
Esta etapa la va enfrentar sin la atención médica que por lógica, él y su familia pensaron que debía recibir desde que le dieron el diagnóstico, pero a pesar de que las pruebas salieron positivas, será aceptado en el hospital únicamente hasta que no pueda respirar sin la ayuda de equipo médico especializado, es decir, cuando esté al borde de la muerte.
Denuncian falta de sensibilidad
Familiares de un derechohabiente detectado con el virus denunciaron la poca sensibilidad de las autoridades del Hospital General Regional (HGR) Número 17 del Instituto Mexicano del Seguro Social en la Región 510, quienes en lugar de brindarle la atención correcta lo mandaron a que esté aislado en su propia casa porque todavía puede respirar por sí solo y no necesita de un tubo de oxigenación.
“Me dijeron que nada más era necesario quedarse en su casa y que cuando ya estuviera muy grave que nuevamente lo trajera”, narró de manera angustiada la señora María Astrid.
Dijo que ante la pregunta que le hizo al doctor para saber si será hasta cuando ya esté a punto de morir su esposo es lo que van a atender, la respuesta que recibió fue: “lamentablemente así es, solamente personas que ya estén a punto de morir y que ya no pueden respirar por sus propios pulmones es cuando nuevamente se les ingresa a una cama (sic)”.
En entrevista con el Por Esto! De Quintana Roo, narró: “fuimos a la Clínica 16 y le dijeron a mi esposo que tiene esa enfermedad del COVID-19; la doctora que lo atendió dijo que lo trasladaran de urgencias aquí a la 510, lo trajo el camillero en ambulancia, trajeron las muestras que ya se la habían hecho, entre ellas una radiografía de sus pulmones y el doctor que me atendió que dijo llamarse Sánchez, pero no me enseñó ni una credencial ni me enseñó alguna identificación que realmente confirme que sea ese su nombre, me dijo que mi esposo todavía no está tan grave, que él puede respirar por sí solo y que no necesita de un tubo de oxigenación”.
Señaló: “yo le comenté a él que pues que si ya le habían diagnosticado eso por qué no lo le daba el tratamiento necesario y me dijo que nada más necesitaba quedarse en su casa y que cuando ya estuviera muy grave que nuevamente lo trajera…”.
Afirmó que fue ahí cuando cuestionó: “¿entonces usted me está diciendo que cuando ya está apunto de morir es cuando ya tiene derecho a ser ingresado?, y el doctor me dijo que lamentablemente así es, solamente personas que ya estén a punto de morir y que ya no pueden respirar por sus propios pulmones es cuando nuevamente se les ingresa a una cama (sic)”.
“Yo no sé si esto sea cierto o no, pero mi esposo no estuvo andando en la calle por diversión y por nada, sino porque él tenía que salir a trabajar, lamentablemente su trabajo nunca le suspendió labores y todos los días tenía que viajar de aquí de la ciudad a la Zona Hotelera y de regreso lo mismo, entonces él siempre anduvo en camión”, comentó.
También lamentó que se le hace algo inhumano de que si ellos (los doctores) ya saben que tiene la enfermedad, y si él está todavía a tiempo para ser atendido para que no necesite de un tubo de oxigenación, no le den el tratamiento adecuado porque tienen que esperar a que realmente esté muy grave.
“Me dijeron que lo aísle en la casa 40 días y que nada más marcara al número telefónico por cualquier duda que tengamos nosotros y lo sacaron y realmente hasta lo sacaron sin ropa con 39º de temperatura, sólo en bóxer porque yo ya me había llevado sus cosas porque en un principio me habían dicho que sí se quedaría hospitalizado, y me lo sacaron al pasillo donde entran las ambulancias y esto es inhumano”, concluyó la esposa del derechohabiente Geovani Gaudencio “N”.
Cabe decir que ayer, elementos de la Guardia Nacional (GN) comenzaron a reforzar la vigilancia en los Hospitales Públicos de la ciudad de Cancún, luego de familiares de un paciente causara destrozos en la recepción de la clínica de especialidades.
Esto, con el objetivo de que se respeten los protocolos establecidos por la Secretaría de Salud en esta contingencia a causa de la pandemia del COVID-19 y luego de que la tarde del pasado lunes, una persona a la que se le negó la atención en el Hospital General Regional (HGR) Número 17 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en la Región 510, causara destrozos en la recepción del área de urgencias.
IMSS carente de personal
Por otro lado, fuentes del IMSS dieron a conocer que actualmente el Instituto Mexicano del Seguro Social está carente de las plantillas nominales completas, pues hay muchos médicos que se fueron de incapacidad cuando se informó que todos los hipertensos, los mayores de 65 años y diabéticos podían tomar licencia y“pues hubo mucha gente que sufre y otros que aprovecharon por miedo y tomaron licencia”.
Se comentó que el IMSS más o menos está careciendo de 700 personas que tomaron licencia, más todos los que se están contaminados por pacientes que los han escupido, por no guardarlas debidas medidas de precaución y han estado cerca de personas infectadas.
“Lo que hacen es mandar a su cuarentena a la gente por falta de personal médico, pero esto está haciendo que cada vez haya más personas enfermas y todo ello hace que el personal esté estresado, esté preocupado, angustiado y hay falta de información hacia esa persona que también viene con una necesidad de que le digan que su familiar está bien, la necesidad de escuchar que si es el coronavirus o no es el coronavirus y que lo pasen y que le digan que se va al pabellón de coronavirus y ya partir de ella no sepa nada; yo creo que también es angustiante porque ya después se baja y se le dice pues ya se murió tu paciente y es entonces que esto desata ira, frustración y una serie sentimientos que la gente también reacciona de alguna manera”, comentó la fuente.
Finalmente mencionó: “yo creo las tomas de decisiones dentro de las direcciones de los hospitales sobre todo mis compañeros del IMSS 510 me decían que en el hospital la toma de decisiones del director han sido oscuras, negras, se ha sacado todo eso por los médicos de medicina interna, los de la unidad de cuidados intensivos que son los que la verdad le están ahorita haciendo frente a todo esto”, concluyó.