Quintana Roo / Chetumal

“Prohibido enfermarse en fin de semana”: denuncian carencia de médicos en la Ribera del Río Hondo

En pleno 2025, familias rurales de Othón P. Blanco enfrentan un viacrucis para acceder a servicios médicos.

Centros de salud sin médicos ni medicamentos en la zona limítrofe con Campeche
Centros de salud sin médicos ni medicamentos en la zona limítrofe con Campeche / Efrén Martin

Habitantes de la Ribera del Río Hondo y de la zona limítrofe con Campeche dijeron que sufren un viacrucis cuando se enferman, ya que los centros de salud carecen de medicamentos y personal médico los fines de semana.

Para recibir atención médica intermedia, los pobladores deben recorrer decenas de kilómetros hasta llegar a clínicas en Nicolás Bravo, Pucté o Javier Rojo Gómez, o bien trasladarse a Chetumal en los casos más complejos.

No obstante, estos desplazamientos no garantizan atención, pues en muchas ocasiones los pacientes se encuentran con la falta de doctores o la inexistencia de fármacos.

Noticia Destacada

Mujer pide solidaridad ciudadana en Chetumal por hostigamiento

De acuerdo con el asesor jurídico de las 16 comunidades de la franja limítrofe, Andrés Blanco Cruz, los habitantes deben acudir principalmente a Nicolás Bravo, donde sí opera una clínica hospitalaria.

El inconveniente es la falta de transporte público y de ambulancias, lo que obliga a depender de familiares o conocidos.

Blanco Cruz aclaró que las caravanas de salud del Gobierno del Estado son programadas y no atienden emergencias.

Solo Caobas y Nuevo Veracruz cuentan con centros de salud formales; en los otros 14 poblados existen casas de atención médica sin personal y con abastecimiento mínimo de medicamentos.

En la Ribera del Río Hondo, los residentes deben desplazarse a Javier Rojo Gómez o Pucté para acceder a servicios médicos, pues no hay atención permanente.

Juventino García, vecino de Sabidos, explicó que para padecimientos leves acude a la casa de salud local, pero para estudios clínicos o enfermedades graves debe viajar.

Antonio Benítez, de José Narciso Rovirosa, señaló la falta de medicamentos y la ausencia de médicos, especialmente en fines de semana, lamentando que en pleno 2025 siga vigente la frase: “prohibido enfermarse en fin de semana”.

También cuestionó la carencia de fármacos, lo que obliga a viajar a Chetumal para surtir recetas.

Roberto Arroyo, de Álvaro Obregón, pidió a las autoridades estatales de Salud atender la problemática y recordó que el supuesto Gobierno humanista no garantiza el derecho a la salud.