
La Laguna de Mocú, ubicada a solo 20 kilómetros del ejido Miguel Colorado, resulta todo un gran espectáculo para los visitantes, debido a sus hermosos paisajes y aguas cristalinas. Además, hay una zona arqueológica cercana que no ha sido explorada.
Para el promotor turístico José Quintal Novelo, es necesario que las autoridades locales inviertan en la difusión de este lugar, perteneciente al municipio de Champotón, para que más personas se interesen en visitar la zona y, así, detonar la economía de la región.

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La Laguna de Mocú es un impresionante cuerpo de agua en medio de la selva, donde se pueden realizar actividades de esparcimiento. Se accede a ella a través del ejido Miguel Colorado, una localidad que se distingue por el trato amable y hospitalario de sus habitantes, quienes sueñan con convertir su comunidad en un importante sitio turístico. Sin embargo, requieren el respaldo de las autoridades para que sus atractivos sean reconocidos.
Una gran aventura
En total, son ocho mil hectáreas destinadas a la conservación y actividades ecoturísticas de bajo impacto, como senderismo, nado, kayak, tirolesa, observación de vida silvestre y ciclismo de aventura, lo que conforma este paraíso en medio de la naturaleza campechana, registrado en 2019 como Área Destinada Voluntariamente a la Conservación.
Además de la laguna, en la región de Miguel Colorado hay tres cenotes. El más visitado es “Agua Azul” o “Azul”, el más grande. Más adelante se encuentra el cenote “Los Patos”, que debe su nombre a la diversidad de aves, como los pijijis, endémicos de la zona, aunque también se avistan especies migratorias.

Según testimonios de visitantes, es imposible bajar al fondo del cenote por la presencia de enjambres de abejas africanas en las paredes. Sin embargo, los paisajes increíbles hacen innecesario descender. Se calcula que tiene un diámetro de 200 metros.
El tercer cenote es el K41, hogar de miles de murciélagos, con 115 metros de profundidad, oculto en la selva. Para visitarlos, hay que atravesar caminos entre sembradíos mecanizados, lo que hace el viaje aún más atractivo.
Regalo de los mayas
El yacimiento arqueológico de Mocú fue registrado ante el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en 1931, y está ubicado en la zona maya denominada de los ríos y lagunas. Constituye un conjunto de vestigios arqueológicos de gran extensión, formado por 12 sistemas, integrados a su vez por plazas delimitadas por montículos, que alguna vez fueron edificaciones abovedadas. Existen pocos estudios sobre este sitio de gran potencial histórico y cultural.
JY