Representantes de la Universidad Autónoma de Yucatán y de la Embajada de Japón en México conmemoraron ayer el 99 aniversario de la llegada del Dr. Hideyo Noguchi a la Entidad, quien dejó un legado trascendente, sobre todo en sus investigaciones sobre la fiebre amarilla.
Al acto, que se llevó a cabo en el auditorio del Centro de Investigaciones Regionales que lleva el nombre del científico japonés, se dieron cita representantes de la Embajada de Japón en México y de la Asociación México Japonesa, quienes rindieron homenaje al destacado médico y bacteriólogo que descubrió el agente causante de la fiebre amarilla y que estuvo en Yucatán en 1919.
El embajador de Japón en México, Yasuhsi Takase, destacó que Japón y México comparten una rica historia de amistad desde hace más de 400 años. Recordó que en el siglo XVII un barco mexicano naufragó en aguas japonesas y los marineros fueron rescatados, con lo que se estableció el primer contacto.
Además, dijo que hace 120 años llegaron los primeros japoneses a Chiapas, México. Y Hace 99 años que el Dr. Hideyo Noguchi estuvo en Yucatán, un personaje que es ampliamente conocido en su país.
Timbre de orgullo
Por ello, dijo que es motivo de orgullo saber que un gran hombre como el Dr. Hideyo Noguchi es conocido lejos de su país y que incluso hay un centro de investigación como el de la UADY que lleva su nombre.
Aunque la estancia de Hideyo Noguchi aquí fue breve, de 4 meses, logró grandes aportaciones y progresos, por lo que hizo votos para que su nombre y fama se siga transmitiendo a las próximas generaciones.
Por su parte, el rector de la UADY, José de Jesús Williams, dijo que es un gran honor para la Universidad recibir a las autoridades de Japón y sobre todo rendir homenaje al destacado investigador que hizo tantos aportes.
Señaló que la invaluable visita del Dr. Hideyo Noguchi fue un gran ejemplo de cooperación internacional, además que mostró siempre una gran calidad humana.
Expuso asimismo que tuvo una enorme capacidad de transmitir sus hallazgos en forma sencilla, sobre todo sus descubrimientos más importantes que fueron sobre la fiebre amarilla. Lamentablemente, dijo que su partida fue a causa precisamente de su exposición a ese mal.
Dijo que, a casi 43 años de su fundación, el Centro de Investigaciones Regionales “Hideyo Noguchi” de la UADY está dedicado a la generación de nuevos conocimientos científicos y en el otorgamiento de servicios especiales, además de difundir los avances en ciencias biomédicas y sociales.
A su vez, la directora del Centro de Investigaciones “Dr. Hideyo Noguchi”, Matilde Jiménez Coello, destacó el ímpetu del destacado investigador que lo llevó a nuevos hallazgos científicos, en particular sobre la fiebre amarilla y a pesar de las limitaciones de su tiempo.
Ingenio y adaptación
Resaltó que el científico tuvo gran ingenio y adaptación para llevar a cabo sus procedimientos en un contexto tropical tan complicado como el de Mérida. En este sentido, lo calificó de personaje emblemático que dio una lección metodológica y de perseverancia, que ha incentivado a investigadores tropicales de toda América Latina.
El Dr. Hideyo Noguchi llegó proveniente de Nueva York auspiciado por el Instituto Rockefeller, en la fase final del brote de fiebre amarilla que azotaba a Yucatán. El investigador descubrió el agente causal de dicha enfermedad en Ecuador y, en 1919, llegó a la Entidad para seguir con sus investigaciones.
Destacó que aportó mucho a la humanidad y su ejemplo de vida dejó una gran lección. Luego, el doctor viajó a Ghana, donde falleció de fiebre amarilla a los 51 años de edad en 1928.
Reconocimiento
El Dr. Raúl Godoy Montañez, Secretario de Investigación, Innovación y Educación Superior del Gobierno del Estado (SIIES), destacó el trabajo que se hace y se sigue haciendo en el Centro de Investigaciones Regionales “Dr. Hideyo Noguchi”.
En el evento se entregó un reconocimiento a la familia del Dr. Otilio Villanueva, quien trabajó con el Dr. Hideyo Noguchi en el Hospital O’Horán.
Estuvieron presentes alrededor de 20 miembros de la Asociación México Japonesa, quienes llegaron específicamente para participar en el homenaje.
(David Rico)