En horas previas a los días dedicados a los muertos, el costo de elaboración de un mucbipollo como para cuatro o cinco personas ronda entre los 400 y 500 pesos, según donde se adquieran los ingredientes, si es en los mercados grandes, los supermercados o las carnicerías y fruterías de las colonias y fraccionamientos.
Sea de pollo o de puerco, el mucbipollo es el platillo que todo Yucatán, nacidos y adoptados, comerán este fin de semana con motivo de los Fieles Difuntos y Todos los Santos, 1 y 2 de noviembre, cuando la gente recuerda a sus seres queridos que se adelantaron.
La masa, la carne, la cebolla, el tomate, la hoja de plátano, sal, aceite, el espelón, el chile max, son los ingredientes básicos de un clásico mucbipollo, aunque en fechas recientes hay quienes lo preparan con mariscos, con jamón y queso y hasta con verduras para los vegetarianos.
El precio del kilo de pollo se disparó de 30 a 35 pesos y, en algunos supermercados, hasta en 42 pesos; el costo del horneado es de 50 pesos en la panadería más barata y hasta de 80 y 100 pesos en algunas.
El espelón pasó de 20 pesos el rollo a 25 y de 30 pasó a 35 pesos el desgranado en las cercanías del mercado Lucas de Gálvez. La masa sigue costando 16 pesos el kilo, aunque hay molinos que ya la subieron a 18 pesos.
La hoja de plátano ronda los 25 pesos, la manteca está en 30 pesos el kilo, cuando hace unos días era de 28 pesos. La carne de puerco está entre 60 y 80 pesos el kilo, el achiote oscila entre 40 y 60 pesos. Los tomates van desde 12 pesos el kilo hasta los 15 pesos, según la calidad y el tamaño, pero lo que sí está muy caro es el epazote que vale 50 pesos un rollo.
Todo con medida
Respecto del consumo de pibes, la directora estatal de Nutrición de los Servicios de Salud de Yucatán (SSY), Ileana Fajardo Niquete, recomendó comerlo con medida atendiendo el valor cultural y espiritual que tiene para la población.
Indicó que los Servicios de Salud de Yucatán tienen un programa para revalorar y proteger las tradiciones alimentarias de la milpa y, en ese sentido, el pib es un manjar, se debe disfrutar y no quitarle valor emocional, cargado de tantas cuestiones espirituales al reunirse a comerlo.
Dijo que el pib, si está hecho con alimentos frescos, caseros, no con exceso de grasas, a lo mejor sin pellejos o partes grasas de la carne de res, cerdo o de pollo, debe consumirse en una porción del tamaño de la palma de la mano, una cantidad de entre 800 y mil 200 calorías, explicó.
Señaló que el consumo responsable debe ser más estricto cuando la persona tiene un problema cardiovascular, de diabetes u obesidad; una alternativa es consumir el xec, con la jícama, mandarina y naranjas, con algún dulce local, como papaya y agua fresca.
(Rafael Gómez Chi)