
Personal del Instituto Nacional de Migración (INM) estuvo hoy por la tarde en Celestún para verificar la presencia de al menos 21 cubanos, quienes habrían arribado al puerto en dos balsas la tarde-noche del jueves. A través de videos, se les observó caminando por la avenida principal y descansando frente a la escuela primaria Bertha María González.
La situación generó opiniones divididas entre los habitantes del puerto. Algunos notificaron a las autoridades municipales para que el caso fuera turnado al INM, con el objetivo de revisar la situación legal de los extranjeros en el país y brindarles atención médica y alimentaria. Sin embargo, otros pobladores que se encontraban en el lugar manifestaron su apoyo y simpatía hacia los balseros, por lo que presuntamente los resguardaron en sus viviendas, impidiendo la intervención del personal de migración.
Durante la tarde de hoy, unidades del INM con base en Mérida, así como una patrulla de la Guardia Nacional, arribaron al Palacio Municipal. Los funcionarios se reunieron con el alcalde, Germán Jesús Cauich Pinto, y posteriormente se trasladaron a un predio ubicado a unas cuadras del sitio, donde, según versiones, los balseros estaban bajo resguardo de los propietarios del lugar.
Hasta el cierre de esta edición, autoridades municipales y agentes de migración continuaban gestionando que la gente del puerto entregara a los cubanos para que se siguiera el protocolo correspondiente de la dependencia con respecto al ingreso y estancia de personas extranjeras en territorio nacional.
JGH