Familiares, vecinos y compañeros de trabajo de Mary Bernardo González, de 35 años de edad, quien perdió la vida en manos de su ex pareja de nombre Esaú Cortés Calderón, solicitan justicia a las autoridades de la Vicefiscalía General de Justicia en Carmen, para dar con el responsable y que éste sea castigado con todo el peso de la ley. Además, señalaron que el certificado médico que fue extendido en la representación social no tiene credibilidad al decir que Mary Bernardo falleció a consecuencia de anoxemia por bronco aspiración o accidente, cuando varios vecinos vieron que la noche del domingo pasado Cortés Calderón discutió con ella.
Mary Bernardo González dejó en orfandad a dos menores, una niña de 14 y un niño de siete años, quienes al escuchar los sucesos del feminicidio en agravio de su señora madre se abrazaron de su tía Guadalupe para soltar en llanto por la pérdida irreparable de su progenitora; mientras que los vecinos, familiares y amigos de Mary gritaban en coro “¡Queremos justicia!”.
“Mi madre temía”
Alexandra Avalos Bernardo, hija de la hoy occisa, indicó que su mamá se separó de Esaú porque es una persona violenta, pero ese individuo la seguía molestando, tanto en su domicilio que se encuentra en la calle Marte, de la colonia Tierra y Libertad, así como en su centro de trabajo, en donde varias compañeras de labores de su mamá fueron testigos de las discusiones violentas.
Indicó que ella siempre veía a su señora madre con algo de temor, como si Cortés Calderón la tuviese bajo amenazas, porque siempre que le decían que denunciara el acoso, así como las agresiones verbales y físicas, ella evadía los cuestionamientos y tocaba otro punto como: “cuiden a los niños”, “tengo algo que hacer”, entre otros.
Señaló que no es creíble lo que piensan las autoridades de que su mamá pereció por accidente o que ella se haya quitado la vida, porque el domingo pasado por la mañana ella estaba feliz, porque había cobrado un dinero de un programa social, y dijo que le iba a comprar unos regalos a sus hijos, por lo tanto las versiones de las autoridades no son aceptables.
“Esaú la violentó”
De igual modo, Gregorio Galindo Galindo, quien es consuegro de Mary Bernardo, expresó que el domingo pasado por la noche se percató que Esaú Cortés estaba discutiendo con la hoy extinta, pero como los pleitos eran del diario, los vecinos no le tomaron importancia, hasta la mañana del día siguiente que encontraron el cuerpo sin vida en el arroyo boca abajo y, junto a ella, algunas de sus prendas de vestir, así como documentos personales.
Por su parte, Guadalupe Bernardo González, hermana de la hoy extinta, manifestó que Mary no pudo haberse suicidado, como piensan las autoridades, porque tenía a dos hijos menores por quienes vivir.
“¿Por qué se esconde?”
Además –dijo- que si Esaú Cortés no tiene ninguna culpabilidad, por qué no ha dado la cara y se encuentra prófugo, pues las autoridades lo fueron a ver a su centro de trabajo, en una empresa que se encuentra a la altura del Rastro Municipal, pero no lo hallaron ni en su domicilio que tiene en la colonia Pedro Sainz de Baranda, donde vive con sus padres y hermanos.
Signos de violencia
Agregó que no tiene credibilidad que su hermana haya tirado la ropa en el arroyo cerca de ella, así como sus documentos y luego quitarse la vida, además dijo que el rostro de su hermana presenta signos de violencia (rasguños), mientras que en los dedos de sus pies y las uñas muestran también excoriaciones, como si la hubieran arrastrado, pero de esas lesiones las autoridades de la Vicefiscalía no han dicho nada.
Cinthia Maricela y Viviana Díaz, compañeras de trabajo de Mary Bernardo González, expresaron que un día antes que el cuerpo de Mary apareciera, Esaú fue al lugar de trabajo de la hoy extinta, con quien comenzó a pelear e incluso le jaloneó de los cabellos y ellas intervinieron, pero esa persona se volvió violenta también contra ellas.
Añadieron que no era la primera vez que el individuo iba por Mary y le hacía el escándalo y agresiones, además existen testigos presenciales que observaron a Esaú Cortés de estar esperando a Mary en la puerta de su domicilio en la colonia Tierra y Libertad. Por lo que los vecinos, familiares y compañeros de trabajo de Mary Bernardo, descartan que su muerte haya sido un accidente; sino más bien se trató de un homicidio.
(Texto y fotos: Fernando Kantún)