Con presencia de efectivos de la Policía Estatal Preventiva (PEP) como precaución ante actos incendiarios ocurridos anteriormente en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCA), vinculados con la empresa Oceanografía, este viernes se llevó a cabo la segunda audiencia de remate del barco “Caballo Azteca” en su segunda almoneda. Luego de que por segunda ocasión se buscara entorpecer el proceso mediante recursos legaloides, la audiencia se realizó sin mayores sobresaltos y al no haber nuevamente interesados en adquirir el bien, chatarreado frente a las playas de Seybaplaya, éste se volvió a devaluar otro 20 por ciento y se decretó una tercera almoneda dentro de otros 30 días.
Aunque la nave cada vez ha perdido su valor, trabajadores que esperan justicia se dicen dispuestos a llegar hasta la última instancia, luego que en la etapa de las almonedas no haya interesados por un bien ya vandalizado, en última instancia será cuando se cedan los derechos a los trabajadores como principales acreedores del embargo, etapa en la que esperan demostrar el delito que se ha cometido con el “Caballo Azteca” pues temen que ya no existirá ningún bien. Esperan que haya castigo y reparación en consecuencia.
Mientras todo esto sucede en la Junta Local de Carmen, el barco “Caballo Azteca” se encuentra desde el pasado mes de julio frente a las playas de Seybaplaya, muy cerca del muelle de Monserrat Sand desde donde se chatarreó impunemente, afectando zonas de captura en una de las peores temporadas de pulpo para los pescadores seybanos.
Impunidad es el rastro que ha dejado la historia de esta embarcación tras de sí, pues antes de reposar en ‘Seyba’ sin ancla, sin motor, sin tripulación, ‘a la deriva’, reposó encallado desde el 2017 a unas tres millas náuticas de Sabancuy, desde donde fue remolcado violando el proceso de embargo cuyo remate se desarrolla en esta ciudad.
Legaloides
Durante el desarrollo de la audiencia, Miguel Sosa Elizaga, representante de Oceanografía, empresa que ahora se hace llamar “Offshore Oceanus S.A. de C.V.” pese a que no existen registros de ese nombre en el Registro Público del Comercio, pretendió echar abajo el remate aludiendo recursos legaloides, denunciados así por los acreedores obreros.
“Offshore Oceanus” pretendía cancelar la audiencia alegando que no habían transcurrido los 30 días determinados después de la primera almoneda del pasado 24 de septiembre, pues no se especificó si eran días naturales o hábiles. El alegato legaloide fue desechado.
La autoridad laboral precisó que las almonedas subsecuentes dentro de un proceso de remante se celebrarán dentro de los 30 días siguientes a la fecha de la almoneda anterior, por lo que la autoridad estaba cumpliendo en tiempo y forma para llevar el desahogo de la diligencia de segunda almoneda, dentro del término de 30 días naturales, desechando completamente el infundado reclamo.
Cabe señalar que debido a que la embarcación ya ha sido prácticamente reducida a chatarra, y obreros tienen firmes evidencias de que fue vendida a un tercero que realiza el chatarreo en Seybaplaya, delito que viola el proceso de remate, temen que ‘lo que queda de la nave’ sea finalmente desaparecido.
Apuntan hacia los antecedentes de todo lo que han vivido como la parte más vulnerable dentro del ‘Caso Oceanografía’, como las dos ocasiones en que se ha incendiado la Junta Local de Carmen, atentados a vehículos e incendios al mismo “Caballo Azteca”, su temor es que para ya no dejar evidencias del chatarreo, se busque provocar un incendio en la nave.
Por lo que se señala en el acta el llamado al Capitán de Puerto de Seybaplaya, Armando Zamarripa Lora, al que se le informa que debido a que dicho expediente se encuentra sujeto a tercera almoneda se sirva a resguardar dicho bien embargado denominado “Caballo Azteca”, con el único fin de que no autorice ningún tipo de movimiento embarque o desembarque sobre dicho bien embargado y en caso omiso se aplique la primera medida de apremio de conformidad con lo que dispone el numeral 731 de la Ley Federal del Trabajo.
Será hasta dentro de otros 30 días, próximo 27 de noviembre, cuando se realizará la audiencia de remate en tercera almoneda, pero ahora el bien ha sido devaluado otro 20 por ciento, bajando hasta 24 millones 649 mil 600 pesos del bien, que antes de ser chatarreado y robado hasta ‘Seyba’, su última valuación era de 38 millones 515 mil pesos.
(Texto y fotos: POR ESTO!)