Tras ser objeto de constantes robos a transeúntes, a casa habitación y hasta negocios, los habitantes de la calle José María Morelos y Pavón en la colonia Francisco I. Madero, decidieron organizarse como “Vecinos Vigilantes”, acción que les permitió detener a un par de delincuentes y recuperar la tranquilidad que habían perdido.
“Hace unos seis meses se realizaron tres robos a casa habitación en una semana, luego asaltaron algunos negocios y a las personas por la noche, por lo que nos organizamos”, explicó el vecino Santiago Salazar.
Añadió que desde que agarraron a uno que otro ratero y no ha pasado a mayores, la situación se calmó; sin embargo, hace poco nuevamente iniciaron robando partes de automóviles y focos a las afueras de las casas.
De igual manera apuntó que, en cuanto observan alguna situación anómala, la reportan de forma inmediata al grupo y en cuestión de segundos los que pueden salen a ver qué está pasando.
El joven comentó que en su momento los robos fueron reportados a la Policía Municipal, aunque no obtuvieron el apoyo necesario pues no se hacían rondines, ya que sólo observan pasar a las patrullas cuando van camino a la academia, pero casi nunca vigilando.
“Fiebre de moto-ratones”
Otro de los entrevistados, el señor Armando, que prefirió mantener sus apellidos en el anonimato, explicó: “en seis meses logramos aminorar la situación, porque ya era una fiebre que seguido hacían de las suyas los moto-ratones, asaltando a los transeúntes en las calles 1 de Junio y Miguel Hidalgo”.
“Tenemos entre los vecinos un grupo de WhatsApp y siempre estamos en contacto, primero iniciamos con un rol de guardias y luego un vecino se ofreció a trabajar como velador por las noches”.
Por otra parte, la señora Yolanda Silva relató las incidencias que se han suscitado en fechas recientes, “la otra noche un ratero se trepó por la iglesia y se fue brincando por los techos, se metió a robar en una casa más adelante y ya se iba con la pantalla. Pues lo agarramos entre todos los vecinos”.
“Comunicándonos entre colonos nos cuidamos, porque la policía está buena, pero para andar espantando a borrachos, porque cuando de verdad la necesitas, la hablas y no se aparece”, concluyó.
(Texto: Diana Bravo Carrillo / Fotos: Antonio Maldonado)