La artesana Guadalupe Cisneros Ramírez, es la primera comerciante que remodela su puesto, ubicado al interior del Parque Ignacio Zaragoza, para evitar ser víctima de los amantes de lo ajeno o que se dañe por el mal clima, debido a que aún permanecerán ahí y deben prevenirse.
“Nos llevemos como dos semanas hacer el puesto, invertimos como unos 30 mil pesos, era muy urgente y necesario, porque de que nos roben, de que nos llovamos y más cosas, mejor tener bien armado el puesto”, declaró la entrevistada.
Dijo que para la realización, solicitaron un permiso en el Ayuntamiento Municipal, no tuvieron problema, además, de que no están dañando el suelo del parque, porque sólo está sobrepuesto y se puede desmontar fácilmente.
“Estamos mejor así, tenemos más protección y seguridad, la lluvia ya no nos afectará, no nos robarán, y además, da una mejor vista, todos lo que lo han visto nos han dicho que está mejor así”, destacó.
Subrayó que quizá con esta acción, sus demás compañeros se animen a realizarlo, pero por la difícil economía es posible que continúen con los puestos de rejas que han tenido hasta que la situación se componga.
“Desde que estoy aquí he visto una mejora en las ventas, la ubicación es buena, he visto un pequeño repunte de ventas, y ahora estamos esperando la cuestión la feria, aunque eso sí, queremos que nos hagan la plaza, que esté lista para tener un lugar, pero mientras aquí estamos”, puntualizó.
El puesto está construido con madera y lámina en las paredes y techos de lámina, al interior se encuentran las artesanías que ahí mismo elabora la señora Guadalupe Cisneros, quien ya se siente más segura de contar con un espacio que le brinda seguridad y protección.
Los demás artesanos continúan con sus puestos sencillos y lona, a la espera de que les construyan de nueva cuenta su plaza, y tengan un lugar más seguro para vender, ya que aunque la ubicación es buena, se requieren de espacios dignos para realizar sus artesanías.
(Texto: Dayana Alcalá /
Fotos: Carlos Valdemar)