CAMPECHE, Cam., 21 de Julio.- “A veces nos es más fácil hacer lo que Dios quiere, que hacer las cosas cuando Dios quiere. A veces nos es más fácil cumplir la Voluntad de Dios, que tener la paciencia para esperar el momento en que Dios quiere hacer su Voluntad”, expresó el párroco de la Iglesia de la Purísima Concepción “Catedral”, Francisco Velázquez Trejo.
Expresó que por ello es que existen muchos reclamos cuando algo no sucede en el momento que se pide y cuestionó a los creyentes de cuántas veces han dicho, “Dios no me cumplió y te aseguro que lo pedí de corazón y con mucha fe”.
Declaró que el Señor tiene maneras diferentes de actuar con las personas, dado que en la actualidad hay mucha tentación y por lo tanto, todos quieren que se les resuelva a la voz de ya.
“La propuesta de las lecturas de hoy es otra bien distinta, en línea con el mensaje evangélico del reino de Dios, se nos habla de la hospitalidad; la primera lectura, del libro del Génesis, nos muestra a Abrahán, que no sólo acoge a los que le piden hospitalidad, sino que suplica a aquellos tres hombres que se queden en su casa y que coman de su mesa”, mencionó.
El líder religioso aseguró que cada vez más, las personas desconfían de todo lo que sea extraño, porque resulta una amenaza y que ejemplo de ello, es como en algunos barrios o colonias se ven letreros en las casas, en los cuales se avisa de que se llamará a la policía si se ven extraños caminando por la calle o se les dará un escarmiento a los delincuentes.
Apuntó que las casas de los campechanos cada vez son menos abiertas y eso por la llegada de inmigrantes que andan en busca de trabajo, que son los que crean desconfianza e inseguridad, pero que ello sucede, porque el ser humano le teme a todo lo que sea extraño y que se salga de lo habitual.
“Nos hace sentirnos inseguros y amenazados, por eso, y no por otra razón, es por lo que aumenta la violencia. Los gobiernos deben implementar mejores estrategias para acabar con la inseguridad”, recalcó.
Velázquez Trejo manifestó que los creyentes del Evangelio son aquellos que, como dice San Juan, escuchan la palabra de Dios y la ponen en práctica, el evangelio no es una doctrina, sino un camino de sanación, de curación y de liberación.
“Según San Pablo, el primer órgano del cuerpo humano implicado en el evangelio es el oído, ya que es en la escucha cuando la fe, que habita en nuestro interior, puede ser despertada. El Evangelio es vida porque es Palabra de Dios, finalizó.