DZITBALCHE, Cam., 10 de marzo.– “Detrás de todo lo ocurrido por los actos de violencia durante la marcha orquestada y financiada por los partidos políticos PRI y PAN, encabezadas por prostitutas que fueron contratadas por los líderes para armar desorden, los edificios y lugares públicos no tienen la culpa por lo que está pasando de las muertes de mujeres y ahora que les quitaron el poder les quieren echar la culpa al Gobierno Federal los de enfrente”.
Lo anterior manifestó en forma categórica el ex regidor Gilberto Poot Mukul, quien se preguntó “cómo no lo hicieron cuando estaba gobernando el PRI o el PAN, porque eran los dueños de la Nación, tanto del poder político y económico, ahora que se les acabó la mina de oro ya no buscan qué hacer, dando patadas de ahogados los líderes de los partidos políticos”.
Aseguró que “ya están plenamente identificados los actores principales de todo este alboroto que se protagonizó y la gente no van a tragarse el cuento como están acostumbrados a hacer los líderes de los partidos políticos y asi quieren vender la idea que el PRI es el mejor, que ahora está desestabilizando a la Nación, con estas acciones ya enterraron al PRIAN para las próximas elecciones, la gente tiene memoria y no se van con el canto de las sirenas traicioneras”.
Poot Mukul dijo el pueblo ya abrió sus ojos y no es fácil aceptar una imposición como están acostumbrados los partidos políticos a hacer, el Gobierno Federal está haciendo lo que le corresponde hacer y no es una tarea fácil enderezar un país, después de un saqueo que duró más de 80 años, de priistas que se sirvieron y se adueñaron con el patrimonio del país.
“Realidad social”
Por su parte, el párroco de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de María, José Luis Yeh Ehuán, refirió que “más que un rechazo, podría mejor decir que es un hecho que nos permite ver la realidad social en la que vivimos, tanto en lo religioso como en lo social, qué intereses hay en el trasfondo en todo esto, es necesario hacer un análisis agudo y serio, no para ofender a nadie, sino para que viendo el problema encontremos buenos y mejores caminos que nos lleven a la paz religiosa y social”.
(Néstor Cuevas)