Los arribos de las embarcaciones en los puertos de Campeche, hasta el momento, no registran un descenso porque la actividad portuaria se considera esencial, sin embargo sería ilógico pensar que no se tendrá un efecto económico adverso por la pandemia del COVID-19, reconoció el director de la Administración Portuaria Integral de Campeche (Apicam), Carlos Eduardo Ortiz Piñera.
Señaló que hasta abril, se tiene el mismo número de arribo registrados hasta ese mes en comparación con el año anterior y que en todo el 2019 fue de 17 mil 500 atraques de barcos con ingresos por el orden de los 300 millones de pesos, recursos que permiten el mantenimiento y la operatividad del Apicam.
Agregó que en Campeche, el puerto con mayor actividad es el de Ciudad del Carmen, motivo por el cual desde hace mes y medio, de los cuatro accesos que tiene, sólo se habilitaron el 1 para ingreso de los peatones y el 4, para los vehículos, con la instalación de filtros en donde se mide la temperatura, se aplica gel antibacterial y la sana distancia como medidas preventivas para evitar la propagación del coronavirus.
También en el muelle cuatro funciona como acceso único para el ascenso y descenso de todas las compañías de la industria petrolera aunque aclaró que Petróleos Mexicanos cuenta con su propia terminal para el traslado de sus trabajadores.
“Con esto confiamos en que podamos mitigar los efectos de la enfermedad pero sobretodo seguir operando, ya que los puertos de Campeche y México en general, no pueden parar”, insistió.
Con respecto a la afluencia de las embarcaciones dijo que en el comparativo hecho de 2019 a 2020, en el primer cuatrimestre, “no hemos visto un descenso significativo en los arribos”, por lo que manifestó su confianza de que se alcance el número de atraques se tuvieron el año pasado que fue de 17,500.
Ortiz Piñera reiteró que de acuerdo al número de arribos, “hasta el momento, el último mes que canalizamos que fue abril seguía muy similar al 2019”.
Detalló que si se registran 17 mil 500 en un año, “probablemente tienes 1250 a 1,300 al mes, que de acuerdo al tiempo, en los meses del año cuando hay más nortes hay menos arribo, los meses como este que no hemos tenido nada, los arribos deben seguir continuando”.
De los ingresos que obtienen por el pago de los servicio explicó que “son diferentes tarifas” aunado que el Apicam, “no recibe presupuesto de parte del Gobierno del Estado” sino que generan sus propio ingresos mediante el pago que reciben.
“Y estamos hablando que son alrededor de 300 millones de pesos anuales los que son los propios ingresos y con esto se cubre el sueldo de todo el personal, también las obras que se hacen en los puertos y operaciones”, especificó.
Del impacto que puede ocasionar la pandemia del Covid-19 en la actividad portuaria, reconoció que se puede registrar un decremento en los ingresos aunque hasta el momento no se observa.
“Aquí hay que ser realistas y muy congruentes, estamos seguros que vamos a tener efectos, sería impensable decir que no va a haber un efecto económico adverso”, significó.
Aunque consideró que con base en “las estrategias que hemos estado tomando y con los lineamientos del gobierno federal que ha mantenido abiertos los puertos de alguna manera no se vea afectada” la actividad portuaria.
De la actividad que llevan a cabo en los puertos precisó que es transporte de personal, y transporte y carga de equipo, siendo Carmen el que registra el mayor número de actividades aunque Seybaplaya va repuntado, al ser también un centro portuario de PEMEX.
Aclaró que en Seybaplaya no se transporta personal es solamente para carga y descarga de equipo, por lo que el riesgo, “obviamente es mucho menor”, sin embargo se contrató personal médico para los filtros permanentes instalados.
(Wilbert Casanova Villamonte)