CALKINI, Cam., 30 de mayo.- El ambicioso proyecto del Tren Maya será un detonante de la economía del Sureste mexicano y para la península de Yucatán, de tal manera que funcionará como estrategia para el aumento del bienestar y calidad de vida de los habitantes de esta región del Camino Real, apuntó el historiador Carlos Antonio Fernández Canul.
El historiador de Calkiní relató a POR ESTO! que el 28 de julio de 1889 se inauguró el servicio de tren mixto Campeche-Mérida; mientras que el 28 de julio 1898 se clavó el último riel en la división Campeche-Mérida.
En 1902, firmaron empresas locales para crear los Ferrocarriles Unidos de Yucatán y en 1958 se realizó el ensanchamiento de las vías del ramal Mérida-Campeche, que se conecta a Coatzacoalcos.
Asimismo, Fernández Canul dijo que este proyecto se planeó desde el Porfiriato (1876-1911), “recuerdo era un niño cuando arribaban los trenes en la antigua Estación, ahora Escuela de Educación Preescolar; se veía un gran movimiento, numerosos cargadores trabajaban al descargar muchas mercancías, pasajeros para Mérida-Campeche, había trabajo para todos, una época que puede volver al concretarse este proyecto.
“El gobierno de la Cuarta Transformación pretende hacerle justicia al Sureste mexicano después de más de 40 años en el olvido de los gobiernos priístas, que se han servido con la cuchara grande y han saqueado al Pueblo de México con miles de familias en extrema pobreza y con este proyecto se pretende crear miles de empleos directos e indirectos.
“Y en plena pandemia, el país no se puede quedar paralizado; ni los comisarios y presidentes municipales, diputados, gobernadores están en cuarentena, todos han roto la cuarentena entregando despensas e insumos, y muchos menos el Presidente de la República”, señaló Fernández Canul.
“Bienvenido, Andrés Manuel López Obrador, para dar el banderazo del inicio de los trabajos del proyecto del Tren Maya”, apuntó con énfasis el historiador de Calkiní.
“Los calkinienses confían en que sí traerá mucho beneficio el proyecto del Tren Maya y en especial a los artesanos; sólo falta que los presidentes municipales no le pongan piedritas al proyecto; ahora hay mucha artesanía, Calkiní está lleno de lugares turísticos, gastronomía, cocina tradicional, sólo les falta promocionarlo y con este proyecto se busca que los artesanos vendan sus productos de manera directa sin intermediarios.
“Sólo los grupos políticos y seudolidercillos ardidos, enviados para a hacer ruido, se oponen a este gran provecto; no hacerles caso, porque ellos viven de sus padrinos políticos que se mueven por unos pesos para intentar poner trabas.
“Bienvenido este proyecto que volverá a dar luz a las miradas de los campesinos, obreros y mujeres artesanas para levantar a las futuras generaciones que están sedientos de justicia y superación”, externó.
(Néstor Cuevas)