"Ya fue mucho pavo, ahora mejor unas carnitas asadas", fue lo que expresaron familias campechanas que esta mañana abarrotaron las carnicerías de la capital del Estado para surtirse de puerco rejalado, chuletas y costillas en vísperas de la tradicional cena de Año Nuevo.
Mientras que los tablajeros reportaron un incremento de entre el 70 y el 80 por ciento en sus ventas, un día antes del 31, los polleros señalaron que sus ventas han caído un 50 por ciento, en comparación con las del 24.
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Ciudadanos como Enrique Méndez, Diana Suárez y Patricia Dzib, comentaron que para la festividad de Año Nuevo prefieren asar carne que cocinar pavo. "Ya estamos hartos del pavo, lo comimos el 24, el 25 y todavía tenemos en el refrigerador", externó don Enrique, quien, al tener una familia numerosa, se llevaba seis kilos de puerco, entre costillas y lomo.
Los expendedores de carnes rojas, como el llamado 'Kahwagi', comentaron entusiasmados que desde temprano comenzó la 'buena venta', alcanzando porcentajes de entre el 70 y hasta el 80 por ciento, en comparación con lo que se vendió previo a la cena de Noche Buena y Navidad.
Asimismo, puntualizó que, con el objetivo de ayudar a la economía familiar, el precio de la carne de cerdo se vende desde los 95 hasta los 120 pesos, dependiendo del tipo de corte que los consumidores prefieran.
Sin embargo, no para todos está cerrando bien el año. De acuerdo con comerciantes de aves, como Miguel Medina, informaron que sus ventas registran una caída de aproximadamente un 50 por ciento, comparado con los días previos al 24.
"Esperemos que mañana se recuperen poco las ventas, porque sí están muy bajas", dijo, al reconocer que para la cena de fin de año muchas familias prefieren algo más simple, como elaborar unas carnitas asadas, al ser una celebración más informal.
