
No se puede tratar de normalizar la deforestación, solo por cambiar el uso de suelo para actividades agropecuarias, y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) debe implementar estrategias más efectivas, así como gestionar castigos más severos para frenar esta práctica, pidieron desde el Congreso Local; al señalar que preocupa la disminución del territorio donde habitan los jaguares y otras especies protegidas del Estado, debido a la destrucción de la selva.
La diputada local, Abigail Gutiérrez Morales, reprobó el incremento de las hectáreas deforestadas y de las actividades agrícolas sin control en el Estado, que dañan e invaden el territorio del jaguar, reduciendo lentamente el área de distribución de estos felinos y separando a las poblaciones entre sí.
Explicó que la fragmentación del hábitat hace que sea difícil para estos felinos cazar o aparearse, lo que representa una gran amenaza para el tamaño de su población y su supervivencia.
Sostuvo que en Campeche es fundamental realizar un monitoreo de jaguares, la promoción de mejores prácticas en entornos productivos, la gestión de conflictos entre humanos y dichas especies, la reducción de la matanza de los felinos y la contribución a una mejor gestión en áreas protegidas.
Se estima que el jaguar perdió aproximadamente el 50% de su rango de distribución histórico y que en los últimos 14 años disminuyó en un 20%. Su hábitat cada vez está más fragmentado, lo que significa que los parches de su entorno están disminuyendo en tamaño, y volviéndose más aislados y menos conectados.