Cultura

Ecos de mi tierra

Luis Carlos Coto Mederos

Raúl Ferrer Pérez

V

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Punto para el camino real

La tierra es mi compañera

desde mucho antes que Yara.

Ay, qué cosecha tan cara

para el que siembra y espera.

Qué batirme con la fiera

poniendo el alma en la mano;

primero el león hispano

y ahora el águila sombría

que en garras de su jauría

puso loma, monte y llano!

Salí del hato y la hacienda.

Soy un cuje de veguero

curado a ciclón y cuero,

y al hambre tras la molienda.

Sin tierra; pero sin venda,

de carreta ni de arado

voy a morir enyugado,

porque los de mi destino

van a salir al camino

a romper ese pasado!

Necesito para el viaje

por este camino real

gente que sienta mi mal

como escollo y como ultraje.

Gente que mire el paisaje

como su tierra perdida.

Gente fuerte y convencida

de que hay que tumbar la cerca

porque la aurora se acerca

y hay que buscar la salida!

Y si hace falta una lira

para anunciar esta hazaña

de rescatar de la caña

la noble sangre guajira,

que no cante esa mentira

del palmar de mi bohío,

de mi bandurria y mi río,

mi tabaco y mi café…

Que eso todo lo tendré,

pero todavía no es mío!

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Octubre 62

El gallo viejo del Norte

nunca fue buen peleador,

fue siempre un abusador

con su serrallo y su corte.

Dicen que no hay quien soporte

bajo su espuela canalla.

Pero si quiere metralla,

que venga a probar el tiro

de mi gallito guajiro

que canta alegre en la valla!

Con maíz robado a chorros

que de mi patio cargó,

bajo su pluma crió

un ceremil de machorros.

Piensa con esos cotorros

poner a mi gallo en raya.

Pero si quiere metralla,

que venga a probar el tiro

de mi gallito guajiro

que espera firme en la valla!

Aunque no encuentre los modos

de picar el canistel

quiere asustar a Fidel

y a Fidel apuestan todos.

Gritan hasta por los codos:

¡Tomamos la siguaraya!

Pero si quieren metralla,

vengan a probar el tiro

de este gallito guajiro

que escarba alegre en la valla!

Todo el que sabe de gallo

repite con el gallero:

No te apures, compañero,

“pollo con gallo pa’mayo”.

Aquí hasta el pipisigallo

tiene en el puño su yaya.

Porque si quiere metralla

ese odioso gallo jiro,

frente al gallito guajiro

tendrá que volar la valla!