MIAMI, EE.UU., 28 de enero (AP).- Si alguien se decide a caminar en medio de los vestuarios de Jefes entre el almuerzo y la práctica vespertina habitual, será mejor que utilice hombreras y un casco, a fin de prepararse para algún impacto.
Y es que existe una buena probabilidad de que esa persona termine disputando un partido informal de básquetbol, contra jugadores de hasta 136 kilos.
Se trata de una imagen común durante la temporada regular: corpulentos integrantes de la línea ofensiva y defensiva que se golpean entre sí, mientras los tackles defensivos Chris Jones y Khalen Saunders intentan avanzar a la canasta -que cuelga en la puerta que lleva hacia las duchas. Usualmente, sus compañeros se juntan alrededor y juegan el papel de aficionados e incluso de árbitros bastante expresivos.
“Cuando entras al juego, es una competencia que no se detiene”, explicó esta semana el ala cerrada Travis Kelce. “Los chicos siempre están jugando o compitiendo de cualquier forma para tener la ventaja sobre alguien más”.
Los partidos informales ilustran algunos puntos de la preparación de Jefes, que jugarán su primer Super Bowl en 50 años: Tienen el carácter competitivo que se extiende a todo el equipo dentro y fuera del terreno.
Genuinamente les gusta estar el uno con el otro. Incluso podrían irse juntos a otro lado para almorzar. Y más que nada, tienen una naturaleza relajada a pesar de estar en un negocio de gran presión y con tanto en juego como lo es el fútbol americano profesional.
Este último punto les podría caer muy bien en medio de una semana con muchos compromisos de prensa, un sinfín de fiestas y distracciones, y que al final de cuentas incluye la preparación para el trascendental partido del domingo ante los 49ers de San Francisco.
“La situación que es única con este grupo es que no se quejan de nada”, dijo el entrenador en jefe Andy Reid. “Cuando necesitan relajarse y divertirse, se relajan. Pero cuando están en el entrenamiento, todo es trabajo”.
Garoppolo aplicará lo aprendido de Brady
Jimmy Garoppolo tuvo un asiento de primera fila en la mejor aula para aprender cómo prepararse para ser un mariscal titular en el Super Bowl.
Después de observar el trabajo que realizó Tom Brady para 2 triunfos de Super Bowl con Nueva Inglaterra, el otrora suplente en los Patriotas tiene ahora la oportunidad de traducir esas lecciones en éxito, durante primer viaje como titular al gran partido, con los 49ers de San Francisco.
“Creo que sólo lo calmado que estaba”, dijo Garoppolo sobre lo que aprendió observando a Brady para los triunfos ante Seattle después de la temporada de 2014 y sobre Atlanta hace 2 años.
“Todos te dicen que tienes que tratarlo como cualquier otro juego, pero él realmente lo hizo. Estaba muy cerca y en persona, aprendiendo todo lo que podía, viendo como seguía con sus cosas y todo. Y obviamente funcionó las 2 veces que estuve con él”.
Brady es el mejor pasador en Super Bowl, llegando en 9 ocasiones al máximo encuentro y ganando en 6, incluyendo 2 con Garoppolo como su suplente.
Esos 2 triunfos fueron memorables. Los Patriots remontaron una desventaja de 10 puntos en el último cuarto para vencer a Seattle y se recuperaron de un 28-3 en contra para derrotar a los Halcones en tiempo extra.