Investigadores del Instituto de Zoología de Kunming y de distintas universidades de China lograron implantar genes humanos en monos Rhesus para el mejoramiento de su desarrollo y evolución cerebral. El resultado fue positivo; los monos incrementaron su inteligencia en comparación con primates comunes.
Se trata de una copia del gen MCPH1, uno básico en el desarrollo fetal.
La revista National Science Review publicó que "el tamaño del cerebro y las habilidades cognitivas son los rasgos que más dramáticamente han cambiado a los humanos durante su evolución, y sin embargo, los mecanismos genéticos que subyacen a estos cambios específicos de los humanos siguen siendo difíciles de alcanzar”.
Tras estudiar al grupo de monos con el implante genético, en comparación con el grupo de control, se pudo notar un comportamiento similar al del cerebro humano, con tiempo de reacción más rápido y una mejora de la memoria a corto plazo.