El jefe de la policía de Minneapolis, Brian O’Hara, confirmó que el tiroteo ocurrido este miércoles en la escuela católica Annunciation dejó un saldo de dos niños muertos, de ocho y diez años, además de 17 personas heridas, entre ellas 14 menores.
“Dos pequeños fueron asesinados en los pupitres donde estaban sentados. Sus padres ya han sido notificados. De los heridos, dos niños permanecen en estado crítico”, explicó O’Hara en conferencia de prensa.
Así ocurrió el ataque armado
Los hechos se registraron alrededor de las 08:30 horas locales, durante la misa de inicio del ciclo escolar en la iglesia de la Anunciación, ubicada en Minneapolis, Minnesota.
De acuerdo con la policía, el atacante se aproximó por un costado del edificio y abrió fuego con un rifle a través de las ventanas, mientras los estudiantes permanecían en sus asientos.
“El agresor estaba armado con un rifle, una escopeta y una pistola. Creemos que utilizó las tres armas”, detalló O’Hara. El número de disparos fue descrito como “docenas”, aunque todavía no hay una cifra precisa.
El atacante murió en el lugar
Las autoridades confirmaron que el tirador fue hallado sin vida en el estacionamiento de la escuela, ubicado en la parte trasera de la iglesia. Se presume que el hombre se quitó la vida tras el ataque.
El hecho generó una rápida movilización policial y sembró el pánico entre alumnos, docentes y familias. El alcalde Jacob Frey calificó lo ocurrido como una tragedia devastadora y expresó solidaridad con las víctimas.
Violencia armada bajo la lupa
El tiroteo en Minneapolis reaviva el debate sobre la violencia con armas de fuego en Estados Unidos, particularmente en los espacios escolares.
Tan solo en las últimas 24 horas, la ciudad ya había reportado otros episodios violentos, lo que incrementa la preocupación de las autoridades y la comunidad.
IO
