* “Queremos la integración no sólo del Gobierno y de las relaciones económicas o comerciales, queremos la integración de nuestros Pueblos, de nuestra América”, afirmó el Presidente López Obrador* Donald Trump felicita a México por la aprobación del nuevo TLCAN* AMLO defendió que a diferencia del TLCAN, el nuevo acuerdo buscará el bienestar de los pueblos de los tres países y no sólo el desarrollo comercial
CIUDAD DE MEXICO, 19 de junio (SinEmbargo/AP).- El Presidente Andrés Manuel López Obrador celebró que el Senado ratificara hoy el Tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Por su parte, el Mandatario estadounidense, Donald Trump, felicitó al líder mexicano y exhortó al Congreso de su país a hacer lo mismo.
“Volvemos a reiterar nuestra determinación, convicción, de mantener relaciones de amistad y cooperación para el desarrollo con Canadá y Estados Unidos”, afirmó López Obrador en un video publicado en redes sociales.
Mientras que Trump expuso en su cuenta de Twitter: “Felicidades al Presidente López Obrador - México votó a favor de ratificar la USMCA hoy por un enorme margen. ¡Es hora de que el Congreso haga lo mismo aquí!” El Gobierno de Trump estableció julio como límite para que el Congreso de EU apruebe el T-MEC.
AMLO asseguró que la aprobación por el voto mayoritario de las y los legisladores demuestra que hay unidad y acuerdo en fortalecer las relaciones de México con los países del norte.
El mandatario destacó la intención de su administración por agrupar a los países de América.
“Queremos la integración no sólo del Gobierno y de las relaciones económicas o comerciales, queremos la integración de nuestros pueblos, de nuestra América”, defendió.
El líder del Ejecutivo defendió que a diferencia del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el nuevo acuerdo buscará el bienestar de los pueblos de los tres países y no sólo el desarrollo comercial.
“Se firmó este tratado hace algún tiempo y no se impulsaron las actividades productivas en México, no se fortaleció el mercado interno, no se crearon empleos en el país y, lo más lamentable, no se combatió la corrupción y la pobreza.
“Ahora, en una nueva circunstancia, podemos tener estas relaciones comerciales, porque son buenas, benéficas, porque significa inversión extranjera en México, empleos, tener garantizado el comercio de las mercancías que producimos en Estados Unidos, con el complemento de que haya bienestar en nuestro País, justicia; es el equilibrio: crecimiento con bienestar, progreso con justicia, porque progreso sin justicia es retroceso”, sostuvo.
El Mandatario mexicano dijo en un mensaje grabado que la votación era “una muy buena noticia”.
“Significa inversión extranjera en México, significa empleos en México, significa tener garantizado el comercio de las mercancías que producimos en los Estados Unidos”, declaró.
Estados Unidos es, por mucho, el principal mercado de exportación para México y hubo poca oposición al acuerdo en el Congreso. Hace unas semanas Trump prometió imponer aranceles a todos las importaciones mexicanas en caso de que López Obrador no tomara medidas para reducir el número de migrantes centroamericanos que cruzan territorio mexicano para llegar a la frontera sur de Estados Unidos.
La Secretaría de Economía indicó en un comunicado que con la aprobación “México manda un claro mensaje a favor de una economía abierta y de profundizar su integración económica en la región”.
El representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, aplaudió la ratificación de México al indicar en un comunicado que es un “paso crucial”.
La aprobación del Senado ya se esperaba. Los aliados de López Obrador son mayoría en la cámara alta e incluso legisladores de la oposición, que están a favor del libre comercio, apoyaban el acuerdo.
El T-MEC se forjó el año pasado con delegaciones que representaban al entonces presidente Enrique Peña Nieto, del Partido Revolucionario Institucional, y de Morena, el partido de López Obrador, para asegurar que tanto el gobierno saliente como el entrante estuvieran en sintonía. El nuevo mandatario asumió el cargo el 1 de diciembre, un día después de que se firmara el pacto.
El acuerdo no necesita la aprobación de la cámara baja mexicana, la Cámara de Diputados, y todavía está a la espera la consideración de los legisladores de Estados Unidos y Canadá.
La ratificación del pacto enfrenta algo de oposición en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, donde los demócratas son mayoría.
Los legisladores mexicanos aprobaron previamente una serie de reformas laborales que habían sido exigidas por Estados Unidos.