Lo que inició como una reunión masiva de motociclistas terminó en una tragedia y caos urbano. La edición 2025 del Acamoto, celebrada del 15 al 18 de mayo en Acapulco, reunió a más de 10 mil participantes, dejó ocho personas muertas, cientos de infracciones y toneladas de basura en la zona turística.
De acuerdo con el secretario de Seguridad Pública de Guerrero, Eduardo Bailleres, el evento no fue autorizado por el gobierno municipal ni estatal.
“El Acamoto es una concentración organizada desde redes sociales, sin coordinación oficial y sin beneficios reales para el municipio”, sentenció.
Durante los tres días de duración, al menos ocho personas perdieron la vida en distintos hechos relacionados con el evento.
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Entre ellos, varios accidentes sobre la Autopista del Sol, la Costera Miguel Alemán y la Avenida Escénica. Además, una mujer fue atropellada mortalmente por un motociclista.
A raíz del descontrol, las fuerzas de seguridad realizaron más de 290 infracciones, detuvieron motocicletas por falta de documentos, y remitieron al corralón más de 115 unidades, algunas con reporte de robo.
El desorden no solo fue vial. Las calles de Acapulco amanecieron cubiertas de desechos, sobre todo vasos de cerveza y botellas de alcohol.
La Promotora de Playas Acapulco, bajo instrucción de la Secretaría de Turismo estatal, desplegó cuadrillas para limpiar las avenidas afectadas, especialmente la Costera Miguel Alemán.
El evento ha generado un debate sobre la falta de regulación de reuniones masivas no oficiales y la necesidad de un protocolo de actuación ante concentraciones que representan riesgos públicos y sanitarios.
IO
