Jesús Peraza Menéndez
Se dice sobre Germán Larrea, dueño del Grupo México poseedor de minas a cielo abierto y cines igual de contaminantes que las minas, anotan medios de información, “es intocable”, meterse con él es ir a la muerte segura o con Alberto Balliéres, amo y señor del transporte de pasajeros, su esposa es dueña de ADO, su grupo empresarial se ha apropiado de miles de hectáreas ejidales de comunidades y pueblos, sus transportes y extractoras derraman químicos abrasivos de sus minas, como cianuro y sulfato de cobre, en ríos y lagos, no quiere un transporte de pasajeros y carga de masas sea el tren maya o el que compita con su monopolio. “Intocables”, lo mismo se decía del Chapo Guzmán o del Mocha Orejas, o del Profesor de los Templarios o de Elba Esther Gordillo o de La Quina, o de Carlos Romero Deschamps o del mismísimo demonio Carlos Salinas –se matan entre hermanos y Raúl Salinas pasó por el reclusorio con la evidencia de sus delitos que limpiaron Fox, FECAL, EPN–, impone con terror con los narcos y traficantes el endeudando al país, antes fue Carlos Hank quien amenazaba con descarrilar la inestable economía mexicana de la corrupción si no lo dejaban en plena impunidad de sus negocios y sus hijos narcos.
Han endeudado a cada persona con deuda pública, cada mexicano debemos 60 mil pesos, que es originada por crédito embolsado por los billonarios, el gobierno de la 4ta Transformación les paga intereses sobre intereses, es usura con especulación y renta fija. Hay que recordarle a AMLO que el presidente Benito Juárez suspendió el pago a deudas externas, lo persiguieron los imperios francés, inglés y español, lo invadió Estados Unidos, entonces Juárez, como AMLO con Marcelo Ebrard se humillan obedeciendo puntualmente a Donald Trump, en su empeño de ordenar el traspatio de la aldea global perdido en franca rebeldía. En México el CNI con el EZLN exclusivo de grupos ancestrales, la clase obrera en las fábricas maquiladoras, los servicios, la infraestructura son igual con la mayoría mestiza, los matan, los persiguen, son los migrantes todos de nuestra América y el mundo. Se precisa hacer frente único.
La “mafia del poder”, agrupa 19 dueños de territorios con todo y sus recursos, no se los van a apropiar ya tienen los títulos de propiedad con la contrarreforma agraria, son propietarios con las reformas estructurales de las telecomunicaciones, de los transportes de carga y pasajeros, socios de la banca internacional, de la venta y compra de armas, de las maquiladoras de chatarra Coca Cola, Sabritas, Bimbo, las cadenas de supermercados, Coppel, Elektra, y tiendas departamentales Sears, la masa de maíz Maseca, de ADO, de las líneas aéreas Volaris, Interjet, de las gasolineras huachicoleras con triple ganancia, aseguradoras, medios de comunicación electrónicos. Son dueños de los depredadores centros turísticos.
AMLO, con su sublime humanismo de honestidad, llama al perdón de los pecados de los billonarios pero condena al sacrificio a la clase trabajadora, representan bíblicamente al rebelde Barrabás enemigo del Imperio Romano que reta ¡si eres Dios, bájanos del crucifijo!, el hijo de Dios no lo escucha, se une al otro al “ladrón arrepentido” porque “más vale un arrepentido que cien justos”, ese es liberalismo puro cristiano occidental, morirá el ladrón perdonado, para compartir el paraíso eterno, bien a bien no se sabe si es un estado de plenitud sin pensar, ni hacer, sin ensayo de error con el goce mundano total o algo inexplicablemente superior a la vida humana, son hipótesis nada más, lo que hay que atender es el aquí y ahora, sobre el sacrificio de la clase trabajadora condenada al pago de los privilegios y la asfixiante Renta Unica con la violencia normal intrínseca al modo de vida que AMLO debía eliminar de tajo, no pagarles ni renta, ni intereses ni deudas fraudulentas, ni encubrir megarrobos ni permitir sus ejércitos privados, como la Policía Federal, instrumentos del poder real.
La automatización no ha podido sustituir a las con los trabajadores las masas productoras y consumidoras, los que creamos la riqueza somos la población adquiriente de la mercancía, los teléfonos, computadoras, los públicos consumidores de las películas, los programas de televisión, las herramientas se quedan con la mercancías estándares industriales intoxicadas con los patrones de conducta inhumanos. Somos también los soldados de los ejércitos, los votantes, los públicos, son el poder real dominado sin la menor fuerza por la idealización del modo inhumano de vida neoliberal, hay que tomarlo todo con huelgas de pagos para ir a la huelga general contra la destrucción de la ecología humana o el clima, es lo mismo. El desenlace será violento, su magnitud depende de la autoorganización política social, de la conciencia de la situación y la capacidad de cada uno con las otras y otros.