Por Olivia Vázquez
La Asociación de Clubes Vacacionales de Quintana Roo (Acluvaq) entregó ayer el sello de certificación a 26 desarrollos legalmente establecidos para comercializar el tiempo compartido. Este certificado que avalan las comisiones consultivas de los municipios del norte del estado junto con la Secretaría de Turismo Estatal, otorga una certeza jurídica y garantía de calidad al consumidor, lo que busca inhibir la operación ilegal y el fraude.
Patricia de la Peña, presidente del sector, informó que los desarrollos fueron revisados por las comisiones consultivas que están integradas por el presidente municipal, Sedetur, regidores de turismo, el Fonatur, el Consejo de Promoción Turística y autoridades.
El certificado se entregó por segunda ocasión en el estado pero el programa pretende extenderse el próximo año a otros estados del país, que han manifestado la intensión de replicar el sello de certificación para evitar los fraudes y la operación ilegal de operadores que en muchas ocasiones son desarrollos fantasmas que sólo timan al consumidor.
El tiempo compartido es una actividad consolidada en el estado que tiene más de 38 mil habitaciones entre Cancún, Riviera Maya y Puerto Morelos y reporta un porcentaje de ocupación superior al 84% anual, generando una derrama económica en servicios complementarios de dos mil 721 millones de dólares anuales con un promedio de estadía de 7.9 días.
México ocupa el segundo lugar a nivel mundial en el número de desarrollos y comercialización de este esquema de hospedaje y Cancún y la Riviera Maya ostentan el primero en todo el país, de ahí la importancia de ofrecer a los turistas la confiabilidad necesaria para adquirir estos servicios.
La primera certificación se llevó a cabo en febrero del 2015 con 18 desarrollos y este año se lograron certificar 26 proyectos.
Dentro de la certificación, la Acluvac también realiza una campaña de promoción donde se difunde el sello de certificación con la finalidad de proteger al consumidor para que verifique que el desarrollo que está comprando sea legal y no sea engañado con productos irregulares.
En este sentido, el delegado de la Profeco en Quintana Roo, presente en la entrega de la certificación, Xavier de Jesús Rosado, indicó que los fraudes o engaños en materia turística se llegan a registrar por la vía electrónica, que están relacionados con todo tipo de servicios, por lo que el llamado al turismo es verificar y cuidar a quien se le dan los números de tarjetas para evitar caer en alguna situación de engaño por operadores que cometen conductas ilícitas.
En el caso de los desarrollos que se encuentran regularizados, indicó que se tiene una mesa de conciliación donde por lo general el turismo llega a un acuerdo inmediato, lo que ha reducido en mucho el número de quejas.