Por Ovidio López
ISLA MUJERES, 14 de octubre.- Este año 2019 estará marcado como el peor año para los pescadores-buzos por representar la alta incidencia de descompresión, por casi 100 casos, cifra nunca alcanzada cuando aún falta más de cuatro meses de temporada de captura, reportó la Cámara hiperbárica.
Hasta al mediodía de este lunes 14 de octubre, la cifra había llegado a 98 langosteros accidentados, y superó el número de toda la temporada anterior con 76 eventos, esto es grave, lo cual puede concluir a muchas secuelas, aunque han sido exitosas las atenciones médicas con la cápsula, con saldo de un muerto, según datos recabados.
La temporada dura ocho meses, de julio a febrero, esta incidencia se venía dando desde las primeras semanas, ahora la unidad esta operando casi a diario para atender uno o dos enfermos con lesiones menores en muchos de los casos.
Todo esto porque los buzos están incursionando en aguas cada vez más profundas, de 40 a 60 metros, en tiempos muy prolongados de hasta una hora. Los protocolos internacionales sobre el buceo profundo, recomienda, una mezcla especial de aire para avanzar a esas profundidades. Los pescadores no hacen nada de eso.
Los datos obtenidos, el último pescador lesionado, fue un buzo de la cooperativa “Isla Blanca”, que causó alta. Se convirtió en el septiembre más activo con casi 40 casos. “Últimamente se dieron 30 ingresos en 30 días”.
Según cuentan los mismos hombres de mar, tienen que acudir a aguas profundas porque no hay manera de sobrevivir, no hay pesca en aguas bajas y en la cercanía de Isla Mujeres, como antes. Ahora acuden de 45 a 55 kilómetros al este y noreste de Isla Mujeres, en la orilla de los cantiles. Hemos publicado aquí la advertencia de especialistas de que deben tomar mucha percusión los pescadores y se han desarrollado cursos sobre el buceo responsable en los meses anteriores, pero parece que no hay respuesta favorable. “La necesidad es mucha”, justificó uno de ellos.