Por Yolanda Gutiérrez
Hasta en un 50 por ciento bajó la demanda de productos y servicios en la Zona Hotelera durante el mes de septiembre y primera quincena de octubre, fechas en las que muchos turistas, especialmente nacionales, aprovechan los precios más accesibles que ofrecen aerolíneas y centros de hospedaje pero a su vez llegan con presupuestos muy reducidos, lo que les orilla a conformarse con los servicios del hotel en que se hospedan y dejar una mínima derrama económica en los negocios.
Después de llevar a cabo un recorrido por la Zona Hotelera se pudo constatar que eran pocos los visitantes que caminaban a lo largo del Bulevar Kukulcán, a excepción del área de Punta Cancún, paso obligado para todo turista que se precie de haber venido al destino; del mismo modo, los comercios de la zona tampoco reflejaban una actividad precisamente boyante.
En Plaza Forum algunos turistas se tomaban la foto del recuerdo con los personajes vestidos de Spiderman, Batman y La Máscara, que se acercan insistentemente a todo visitante que camina sobre la avenida o tiene intenciones de ingresar al centro comercial, hasta que consiguen convencerlos.
La mayor parte de los locales comerciales carecían de clientes en su interior y tampoco eran muchas las personas que recorrían las instalaciones, situación similar a la registrada en el mercado de artesanías Coral Negro, donde alguno que otro visitante curioseaba en los locales; mientras que casi todos los comerciantes permanecían con los brazos cruzados y sólo se animaban cada vez que un grupo de turistas descendía de los camiones urbanos, invitándoles a cruzar hasta el mercado, que suele bullir de actividad durante las temporadas altas.
Carlos Ponce, empleado en una agencia de viajes, consideró que “nos estamos manteniendo con una operación de alrededor del 40 por ciento, mientras que en temporada alta la demanda era de casi el 90 por ciento; aunque estamos más bajos que hace un par de meses, se compensa porque puede haber un día o dos malos, con algunas ventas y el tercero es un poco mejor”.
Añadió que muchos visitantes aprovechan las tarifas más bajas que ofrecen hoteles y aerolíneas y planifican sus vacaciones durante los meses de septiembre y octubre, al considerar que pueden viajar a Cancún con mejores precios.
“Por lo general es gente que llega a un hotel con el sistema Todo Incluido donde encuentra lo que necesita y como ya pagaron el paquete, no gastan ni un centavo fuera del hotel, prefieren pasar sus días de permanencia en las instalaciones, si acaso compran un tour, que suelen ser a Isla Mujeres, a las zonas arqueológicas de Tulum, Cobá o Chichén Itzá, pero son muy pocos los que se inclinan por Xcaret o Xel-Há, por ejemplo, al considerar que son demasiado caros”.
En tanto que Antonio Ferrer, encargado de una platería, manifestó que “bajó la demanda, pero ahora llegan turistas extranjeros de más poder adquisitivo, lo que se traduce en mayores ingresos, ya que un turista canadiense o norteamericano se gasta más dinero en una pulsera, por ejemplo, que cinco mexicanos que vienen a Cancún con un paquete Todo Incluido y quieren todo barato, casi regalado; septiembre y octubre son los meses más difíciles, dentro de unas semanas se volverá a ver a más visitantes y para entonces confío levantar la demanda que ahora, que está por los suelos”.