Por Yolanda Gutiérrez
Aunque el cielo presagiaba lluvia y hubo más nubes que claros, el domingo se registró una buena presencia de bañistas en las principales playas de nuestro destino, donde predominaron los usuarios de la localidad, especialmente en balnearios públicos como Gaviota Azul.
En tanto que fueron relativamente pocos los turistas nacionales que optaron por disfrutar de los arenales y se observó una mayor afluencia de visitantes extranjeros, especialmente en las playas ubicadas frente a los hoteles.
Con temperaturas máximas de 30 grados centígrados y una sensación térmica de 36 grados, así como vientos del sureste de 15 a 25 kilómetros por hora, así como olas de muy escasa altura, a pesar de los nublados que se compaginaban con momentos en los que el sol aparecía brevemente, el domingo se registraron favorables condiciones climáticas que invitaron a pasar unas horas de relax en las playas o practicar algún deporte acuático.
Según los pronósticos, la entrada de aire marítimo tropical con variable contenido de humedad del Golfo de México y mar Caribe hacia la región peninsular y al estado de Quintana Roo favorecen la presencia de nubosidad variable dispersa, lluvias dispersas con chubascos ocasionales aislados acompañados de actividad eléctrica sobre algunas zonas, principalmente después de mediodía.
En la zona considerada pública de Gaviota Azul, cerca del acceso, queda ya muy poco espacio libre para que los bañistas se instalen desde que, aunado a los dos clubes de playa, otros particulares acapararon los arenales con camastros, mesas y sombrillas que, pese a la baja demanda, producto del mes de octubre, se encontraban el domingo dispuestas sobre una amplia superficie.
Las quejas sobre este acaparamiento no se hacen esperar entre los bañistas, especialmente en familias y grupos de amigos que suelen frecuentar Gaviota Azul los fines de semana y se encuentran con que ya casi no tienen espacio para instalarse donde quieren.
“No me parece bien que se pongan las sombrillas y camastros casi en la mera línea de playa, invadiendo la zona federal, lo que tengo entendido no se puede hacer, pero a esta gente les vale y lo peor es que a los inspectores de la Zofemat no parece importarles”, expresó Martín Villaseñor, quien junto con un grupo de amigos acudió a pasar la mañana del domingo en la playa.