Por Miguel Ángel Fernández
CHETUMAL, 15 de noviembre.- “Rechazamos rotundamente el aumento en los costos del cruce Playa del Carmen-Cozumel en perjuicio de los quintanarroenses”, manifestó el diputado local José Luis Toledo Medina, quien aseguró que pedirá la intervención de la XVI Legislatura, mediante un exhorto para que Ultramar no aplique estos incrementos en el servicio.
Asimismo, dijo que analizará la posibilidad de interponer un amparo colectivo contra la naviera, para impedir que aplique esta medida que atenta contra el bolsillo de los quintanarroenses y contra el flujo de personas entre ambos destinos.
“Estamos totalmente en contra de estas medidas, es un negociazo de la empresa”, recriminó el legislador, quien considera que se trata de un abuso en contra de los usuarios del servicio.
“Chanito” Toledo lamentó que la naviera Ultramar pretenda, a partir del lunes 18 de noviembre, implementar un nuevo aumento, cuando apenas en el mes de marzo habían incrementado sus precios.
El diputado criticó que lo grave es que ahora el incremento afectará a la categoría “Plan Quintana Roo”, es decir, en perjuicio de los quintanarroenses.
Por su parte, el diputado Roberto Erales Jiménez recriminó que “es un abuso y una inconciencia, es una empresa sin ningún compromiso social”.
Lo anterior porque la tarifa especial aplicada a locales, “Plan Quintana Roo”, en su cruce a Cozumel, se duplica al pasar de 70 a 150 pesos sencillo y de 140 a 300 pesos redondo.
“Es un atentado contra los quintanarroenses, principalmente contra los habitantes de Cozumel que tienen que atender sus asuntos personales de salud o de trabajo en Playa del Carmen. La gente de Cozumel lo estará sufriendo y no está de acuerdo con ello”.
Erales Jiménez señaló que Ultramar es una empresa sin compromiso social, que sólo ve sus ganancias, y no le importan las familias de Cozumel, Playa del Carmen y de todo el estado.
“Sabemos que ahora van por los acuataxis, un monopolio que afecta y afectará muchos sectores sociales”, dijo.
En ese sentido, es necesario señalar que Ultramar pretende arrancar en diciembre el servicio de acuataxis en Cozumel mediante dos embarcaciones para 150 pasajeros, y todo indica que nuevamente el costo de sus botes se lo carga a los usuarios con los aumentos.
La medida ha generado rechazos de transportistas, quienes consideran una competencia directa en su perjuicio.
Es necesario mencionar que los abusos de Ultramar han sido constantes durante los últimos dos años en perjuicio de los quintanarroenses y de la actividad turística. Apenas el año pasado habían realizado un aumento sustancial en sus tarifas y ahora regala como “Buen Fin” el anuncio de nuevos incrementos en las tarifas para el cruce Playa del Carmen-Cozumel para las familias locales.
Ultramar posee más del 95 por ciento de los 5 millones de viajes anuales que se registran en la zona, dejando apenas el otro 5 por ciento a la naviera Naveganto, además de que es el dueño absoluto de los servicios de carga de Punta Sam hacia Isla Mujeres y viceversa, tras someter a la empresa local Marítima Isla Mujeres, que se declaró en quiebra.
La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) se ha mantenido como un órgano que únicamente solapa todas las arbitrariedades que comete frecuentemente la naviera Ultramar, que se mantiene más que protegida debido a que goza de completa impunidad.