Quintana Roo

Le tiembla la mano a la Profepa

De la Redacción

 

TULUM, 21 de diciembre.- Pese a que los desarrollos a todas luces incurren en inconsistencias y a pesar de que han sido clausuradas, estas obras siguen en pie, lo que deja en evidencia que este destino turístico y ecológico es muy descuidado por las autoridades federales en materia ambiental.

Lo anterior queda en manifiesto, siendo que ambientalistas locales expresaron que se ve con las múltiples obras que se llevan a cabo en este centro turístico, principalmente en la frágil zona costera, en Punta Piedra y el Parque Nacional.

Lamentaron que pese a la evidencia de la devastación de los recursos naturales, ninguna instancia gubernamental atienda verdaderamente a aquellos que inicien obras que atenten contra el ecosistema de la región.

Refirieron que además hay terrenos que se han detectado haciendo destrucción de mangles y duna costera, implantándoles clausuras y multas económicas, pero no revierten el daño causado.

Expusieron que lo que se necesita, además de frenar definitivamente los proyectos nocivos, es que también reparen la devastación de todo terreno ecológico que hayan afectado en su afán de construir.

Señalaron que en lo particular, entre la zona hotelera y el Parque Nacional grandes extensiones de superficies de selvas han sido destruidas por el ambicioso y ecocida desarrollo de complejos turísticos que contravienen las normativas que protegen el medio ambiente.

Evocaron que el problema inicial de estos proyectos no únicamente es que no cuenten con la Manifestación de Impacto Ambienta (MIA), sino se detengan definitivamente y se resarcen las afectaciones.

Urgieron que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) tenga mano dura contra esos ecocidas y también a los funcionarios que de manera corrupta aprueban estos proyectos nocivos.