Quintana Roo

En mal estado, edificios de Corales

Por Yolanda Gutiérrez

 

En deplorable estado se encuentran muchos edificios del fraccionamiento Corales, con enormes grietas, techumbres a punto de desmoronarse y varillas visibles por todas partes, motivo por el cual las familias que residen en estos inmuebles temen que en cualquier momento pueda suscitarse un derrumbe, sobre todo si un huracán de gran categoría impactase en la zona.

Tras llevar a cabo un recorrido por el fraccionamiento, que tiene más de 20 años de antigüedad, se pudo constatar que son muchas las viviendas que presentan grandes grietas, algunas de las cuales prácticamente llegan desde el primer nivel hasta la azotea.

Además los techos de algunas terrazas están tan despostillados que pueden apreciarse las varillas que los sostienen, mientras que son varios los muros con huecos; de las escaleras, ni qué decir, ya que la mayoría también tienen grietas y fisuras severas que se aprecian a simple vista desde su parte inferior.

Vecinos que residen en estos inmuebles en mal estado sienten temor de que, en caso de huracán, pueda caerles un techo encima o incluso que el edificio colapse por completo con gente en su interior.

María  Rodríguez vive en el tercer nivel de un edificio ubicado casi frente al mercado de Corales, el cual compró hace unos 22 años confiada en la publicidad de la empresa constructora, que garantizaba casas sólidas.

“Cuando vinimos mi esposo y yo a ver la casa muestra todo era muy bonito, la casa estaba construida de puro bloque y la persona que nos la vendió nos aseguró que era tan sólida que ni un terremoto podría derribar el edificio, pero en realidad las casas son prefabricadas, nada que ver con lo que nos vendieron”.

Agregó que varios vecinos tienen problemas estructurales y en su caso concreto, el techo de la terraza comenzó a desmoronarse poco a poco, hasta el extremo que prácticamente toda la varilla salió a la luz.

“Reconozco que es nuestra responsabilidad reparar el techo pero la situación no está para gastos, prácticamente vivimos al día y aunque mi esposo y yo trabajamos, los salarios no alcanzan, entre otros motivos porque el hijo mayor estudia en la universidad y son muchos los gastos”.

En tanto que Cristina Pacheco, ama de casa, manifestó que desde hace varios años comenzaron a aparecer grietas, primero en el techo de la recámara y con el paso del tiempo en toda la vivienda.

“Se están haciendo cada vez más grandes tanto a lo largo como a lo ancho y me preocupa que si llega un huracán fuerte el edificio no resista, ya está muy viejo, creo que los materiales con los que se hicieron las casas no son de buena calidad, la verdad tengo miedo de que si nos viene uno estallen las ventanas o se me pueda caer encima una pared o el techo, estas casas son ya bastante viejas y nunca estuvieron bien construidas pero con tanto tiempo que ha pasado, no hay ni a quién reclamar”.