De la Redacción
PLAYA DEL CARMEN, SOLIDARIDAD, 13 de enero.- El desorden y desesperanza del actual gobierno municipal de la morenista Laura Beristain Navarrete no sólo se muestra ante el incremento desmedido del ambulantaje en el primer cuadro de la ciudad, también por la proliferación de limosneros, tanto discapacitados, personas de la tercera edad y las conocidas como “Marías”.
Incluso, al problema de los limosneros debe agregarse que en los semáforos del bulevar Playa del Carmen, desde la avenida 28 de Julio hasta el arco vial poniente, al extremo sur de esta vía, hay desde payasos, malabaristas y hasta limpiadores de vidrios, en un incremento desmedido desde los últimos meses, ante la evidente complacencia del gobierno municipal, aún cuando esté en riesgo la integridad física de las personas.
Vale la pena comentar que precisamente es trabajo que le compete no solamente a Fiscalización municipal sino también al DIF municipal, a través de la Dirección de Grupos Vulnerables, dado a que muchos de los limosneros son personas con discapacidad, de la tercera edad y mujeres adultas hasta con menores de edad para darle lástima a la gente.
Precisamente el DIF Solidaridad está facultado para realizar las investigaciones correspondientes, el conocer las condiciones de vida de estos limosneros e integrarlos a los programas, de así calificar, así como poder contactar a familiares y que se hagan cargos de ellos.
Sin embargo, ni el DIF municipal y mucho menos Fiscalización de la tesorería de Solidaridad realizan su trabajo para poder evitar que los limosneros se apoderen de las calles del centro de la ciudad, pero lo peor es que la problemática cada día va en aumento, en un evidente desorden solapado por la alcaldesa Laura Beristain Navarrete, al no exigir resultados a sus funcionarios.