Por Víctor Rodríguez
PLAYA DEL CARMEN, SOLIDARIDAD, 15 de enero.- Diputados locales sátrapas, improductivos y de los Congresos Estatales más caros del país, que perciben salarios mayores al propio Andrés Manuel López Obrador, presidente de la nación, en una burla al pueblo los 25 legisladores percibirán 130 mil pesos mensuales entre remuneración, gestoría social y “casas de atención ciudadana”, acusó César Calderón Caballero, representante de la Corriente Crítica de México en Quintana Roo.
Hay que recordar que este año 2020, la Décima Sexta Legislatura del Estado, que conforman el Poder Legislativo del Estado, tendrá un presupuesto de 485 millones 622 mil 930 pesos, lo que representa un aumento de 16.7 millones de pesos en comparación con lo ejercido en 2019, que fue de 468 millones 858 mil 458 pesos.
De manera desglosada, cada uno de los 25 diputados que conforman el actual Congreso del Estado percibirá casi 130 mil pesos mensuales, de los cuales, 66 mil 284 pesos es por remuneración bruta cada dos quincenas, más 35 mil pesos por gestoría social y 25 mil pesos para mantener sus “casas de atención ciudadana”, establecido y oficializado ya en la Ley Orgánica del Poder Legislativo.
Como una desfachatez fue calificado este dispendio abusivo de los legisladores, recordando que nunca se aclaró el destino de más de 100 millones de pesos en “ayudas sociales”, que ejerció el panista Eduardo Martínez Arcila, entonces presidente de la Gran Comisión, asegura Calderón Caballero.
“Es triste como ciudadano mexicano ver cómo estos pseudo representantes del pueblo, que sin importar afiliación partidista son los mismos dentro del mismo saco, la misma porquería y que no representan el cambio que encabeza el presidente, están aprovechando la oportunidad, para algunos quizás la última de dejar de ser pobres y otros, para luego brincar a otro puesto o cubrirse las espaldas, sin importarle los ciudadanos”, afirmó.
Dijo que los diputados locales del partido Morena son quienes daban esperanza de cambio pero también violan los principios de no robar, no mentir y no traicionar, menos comparten los ideales de López Obrador, demostrando que son unos “chapulines” de la política que se sirven sin ética y moral con la “cuchara grande” de los recursos públicos.
El pueblo paga las consecuencias de la ineptitud, corrupción, falta de ética y de vergüenza, de modo que los únicos calificativos que se merecen nuestros diputados locales es de sátrapas, improductivos y de los más caros del país.