Por Luis Enrique Cauich
KANTUNILKÍN, LÁZARO CÁRDENAS, 23 de mayo.- Las lluvias que se registraron este viernes en la cabecera municipal no fueron torrenciales y fueron de forma esporádica, sin embargo representaron una “bendición de dios”, para los campesinos del municipio que ya sembraron sus cultivos, así que ahora esperan tener una buena producción, al menos para el autoconsumo.
Productores locales señalaron que con las lluvias de semanas pasadas realizaron las quemas de sus áreas de producción y comenzaron a sembrar maíz, sandía, calabaza, entre otros productos, que comenzarán a producirse en algunos meses y que permitirían a las familias sobrellevar la crisis originada por la pandemia.
Ante la falta de empleos por la emergencia sanitaria, la agricultura es una de las actividades que se ha vuelto primordial, pues debido a la falta de ingresos, los productos que se cosechen no sólo pueden consumirse por la familia, sino también venderse e intercambiar con otros productos que otras familias tengan.
También beneficia a ganaderos
Para el campo las lluvias de los últimos días han venido a darle vida a las siembras de productos, así como a los potreros que poco a poco van reverdeciendo y con ello el alimento de las reses comienza a ser un poco más, con lo que se reduce el riesgo de perder los hatos ganaderos por el bajo peso de los animales.
En contraparte, las lluvias han dejado calles en mal estado por la falta de mantenimiento y han comenzado a ocasionar el brote de moscos, debido a que hasta el momento no se ha realizado la nebulización en la cabecera municipal para hacerle frente a los zancudos que transmiten enfermedades como el dengue.