Por Luis Enrique Cauich
SAN ÁNGEL, 23 de mayo.- Con recursos propios del ejido Chiquilá y su anexo San Ángel, la directiva ejidal comenzó este sábado a realizar la distribución de despensas como apoyo emergente a los comuneros que pertenecen a este núcleo agrario y que se han visto seriamente afectados por la pandemia del coronavirus.
El comisariado ejidal Héctor Loeza Rivas, informó que se invirtieron recursos que tiene el ejido y también se contó con el aporte de ejidatarios que tienen un poco de ingresos y que no han dudado en compartirlos con sus compañeros, apoyándolos en esta situación que ya lleva dos meses, que mantiene en confinamiento a todos los habitantes.
Dijo que como toda persona, como todo trabajador, el ejidatario de Chiquilá y su anexo San Ángel, ha sido afectado, por la falta de trabajo, sea pescador, agricultor, albañil, carpintero u otra actividad que desempeñen, sus trabajos se paralizaron por la pandemia y no hay ingresos.
Aunado a esto, no se sabe con certeza las fechas cuando comenzaría la reactivación gradual de las actividades, cuáles serían las medidas que se deban adoptar a partir del inicio de las actividades con la nueva normalidad.
Y mientras más se tarde la pandemia, los efectos seguirán agravando la situación económica de los ejidatarios y es por ello que decidieron apoyarlos con un poco de despensa que comenzó a ser repartida hasta en la puerta de sus hogares de cada uno de los comuneros.
Loeza Rivas señaló que este sábado la distribución se realizó en la comunidad de San Ángel a 15 kilómetros de Kantunilkín y hoy domingo, continuarían en el puerto de Chiquilá, considerada la puerta de acceso a Holbox, donde los ejidatarios estarán recibiendo este apoyo por parte del ejido.