Por Miguel Améndola
TULUM, 23 de mayo.- Los miles de trabajadores que laboran en la Zona Arqueológica de Cobá, que por la contingencia se quedaron sin trabajo por más de dos meses, no cuentan con muchas opciones de autoempleo, más que únicamente la limpieza de terrenos.
La venta de artesanías, gastronomía, recorridos guiados, renta de bicicletas era lo que sostenía al 100 % de las casi mil familias que habitan este poblado turístico-maya, pero debido a la pandemia todas esas actividades se paralizaron por completo desde el 23 de marzo.
Desde entonces, los comuneros padecen por la falta de ingresos económicos por concepto de la industria turística, siendo que su ventana de empleo se reduce a unas cuantas opciones.
En ese tenor, Hilario Tuz, vendedor de artesanías, refirió que batallan para conseguir el sustento diario para sus familias al no tener la alternativa de las actividades turísticas de lo cual dependen los más de cuatro mil habitantes.
Expuso que otra manera de subsistir era con la siembra de semillas para su autoconsumo, pero debido a la suspensión de la actividad de quemas se quedaron paralizados en ese segmento.
“La verdad aquí estamos sin ninguna oportunidad de negocio más que la limpieza de terrenos pero la siembra aquí no se vende y nada más es para autoconsumo, pero con esto de que se prohibió la quema nos quedamos de brazos cruzados”, espetó.
En tanto, el delegado de poblado, Cornelio Chimal, mencionó que los pobladores se ven muy desesperados al no tener sustento económico para comprar sus alimentos y no salir a exponerse.
Manifestó que la limpieza de terrenos es la única opción de algunos para ganarse unos cuantos centavos, pues otra manera de ganarse dinero simplemente no hay.
No obstante, los entrevistados declararon que se aproxima el regreso a las actividades comerciales, por lo que esperan que en las siguientes semanas puedan empezar a registrar ganancias.