Un ciudadano de la comunidad de Kancanchen fue objeto, al parecer, de una estafa, pues entregó el cerebro de un equipo de Internet que tenía en su casa y no sabe a quien, pues las personas que llegaron por ese aparato ni siquiera se identificaron.
El detalle es que cuando reaccionó y preguntó a su esposa si esas personas habían firmado algún documento por llevarse el equipo ella le dijo que no; fue entonces cuando se dio cuenta que que lo ha Ian estafado.
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El reporte policial de los hechos indica que ayer como a eso de las 4 de la tarde un ciudadano de Kancabchen reportó que había dijo objeto de una estafa.
Refiere que se acudió a verificar el caso y al llegar a la propiedad de esa persona, ésta dio a conocer que llegaron a su casa unas personas a bordo de una camioneta gris en donde venía una mujer de 50 años y una persona más de 25 qué se había bajado, la cual le dijo a él que no tenía escalera para subir al techo.
Jacobo ofreció la escalera qué tienen en su domicilio, y hasta el mismo se había ofrecido a subir al techo a desarmar el cerebro de un equipo de Internet satelital y se había dado al muchacho de 25 años y luego se habían retirado sin decirle nada.
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Él pensaba que esas personas habían firmado a la vista de su mujer, algún documento por el equipo, que se habían llevado pero no fue así: por ello el hombre cayó en la cuenta que no había dado ese equipo a un desconocido.
Por ello habló a la empresa que le instaló ese equipo para preguntar si había mandado por ello y ahí lo único que le dijeron era que acudirá a interponer su denuncia ante las autoridades competentes.