Cristo Jesús nos enseñó que todos debemos ser una gran familia y por eso mandó a los apóstoles a que se conociera la buena noticia de la salvación en todo el mundo, dijo ayer el Obispo Auxiliar Pedro Mena Díaz, en la misa que ofició en la comisaría de Chablekal, en el marco de la celebración de la muerte de santa Úrsula.
Hoy estamos conmemorando el Día Mundial de las Misiones. Como iglesia tenemos que recordar esta misión, esta vocación que el mismo Jesús le dio, esa misión, esa vocación, ese mandato de llevar a todas partes la buena noticia de la salvación y siempre tendremos que seguir cumpliendo con este mandato.
Los Papas nos van diciendo con toda claridad que la iglesia existe para evangelizar, para llevar esa buena noticia a todas partes y vemos cómo los apóstoles, con la fuerza el Espíritu Santo, fueron cumpliendo plenamente su misión evangelizadora y así es como nosotros podemos ir ligando lo que estamos celebrando hoy por el Domingo Mundial de las Misiones, con esta fiesta de santa Úrsula y la vivencia del Evangelio.
Lo que el Señor nos va enseñando es que Jesucristo envía a los apóstoles y los apóstoles con la fuerza del Espíritu Santo van por todas partes a llevar esa noticia. Esa noticia ha llegado a nosotros pero no todos la aceptan, hay quienes la aceptan, hay quienes no la aceptan; ahí se va cumpliendo incluso lo que el mismo Jesucristo dijo que él no ha venido a traer la paz, sino la división, porque en la familia, dice, estarán dos contra tres y tres contra dos; es decir, que algunas de las familias escucharán ese mensaje y se convertirán y otras no.
Santa Úrsula aceptó el mensaje de salvación, pero su padre no. Y esto se fue repitiendo especialmente en los primeros siglos, muchos santos aceptaron la palabra del señor pero sus papás no querían y sus hermanos no querían, y así es cómo tenemos a los primeros santos que fueron mártires que ofrecieron su vida, como santa Úrsula.
Cuando nosotros veneramos a los santos decimos: este no solamente escuchó la palabra de Cristo, sino que la puso en práctica; en tanto que a otros les entra por un oído y le sale por el otro. Eso es lo que muchas veces nos pasa: escuchamos la palabra, incluso podemos ser expertos en hablar de la palabra, pero la palabra se queda en el cerebro y no baja al corazón.
Todos los santos ya canonizados y venerados y que están en los altares demostraron que siempre la palabra de Cristo bajó a su corazón y por eso son nuestros modelos; entre otras cosas, escucharon la palabra, bajó a su corazón e hicieron que esa palabra fuera lo que verdaderamente guiara su vida, de tal modo que cuando se les presentaron distintas circunstancias pudieron decir: La palabra de Dios que he escuchado está en mi corazón, es la que me guía.
Recordó que a santa Úrsula la quisieron casar con un pagano por su papá, pero ella inventó una peregrinación con otras personas para irse a Roma a fin de escaparse porque le querían imponer su matrimonio. ella decía: mi corazón está solamente con el Señor. En su peregrinación, en el camino llegan por Alemania y en ese sitio el jefe de unos invasores terribles se enamora de santa Úrsula y se quieren casar con ella, pero prefirió el martirio antes de renunciar a Cristo y cumplir con su palabra de servir a los demás y hasta de entregar la vida por los demás y renunciar al poder que le ofrecían los que deseaban casarse con ella.
—Santa Úrsula entendió muy bien que si se casaba con el que le decía su papá iba a tener poder y si se casaba con el que era el jefe de los invasores paganos y terribles, iba a tener poder, iba a ser la consentida de todos de acuerdo al mundo; por eso decimos que santa Úrsula ya había aceptado la palabra del Señor en su corazón, porque no sucumbió a las tentaciones del poder, para no frustrar su vida para Dios y prefirió la gloria de Dios.
Hoy estamos en el 2018 y acaban de canonizar a san Óscar Arnulfo Romero, uno de los santos que don Manuel Castro Ruiz, ex Arzobispo de Yucatán, conoció, y que fue martirizado en El Salvador por ser fiel a su ministerio de pastor. Hoy vemos que la palabra del Señor a 2018 años de distancia sigue siendo viva y eficaz, como lo dice la carta a los Hebreos.
Por eso tenemos que seguirle pidiendo al Señor que para cumplir nuestra misión evangelizadora tenemos que conocer bien su palabra y que la vivamos primero y la anunciemos a los demás, porque sigue siendo viva y eficaz. Pidamos a santa Úrsula que nos da ese modelo y conocer bien el proyecto de Dios, que sea la intercesora de todos, especialmente para aquellos matrimonios que están pasando problemas, que pongan en práctica la palabra del Señor y solucionen sus problemas en el amor para que haya paz y familias unidas viviendo con eficacia la palabra del Señor, concluyó.
(Víctor Lara Martínez)