Yucatán

Me canso ganso

Rafael Mis Cobá

El T’alkú de la Tía Juana

Venteros y clientes del mercado Lucas de Gálvez se dieron un taco de ojo al admirar la belleza celestial de la tía Juana, luego que acudió a la sección de animales exóticos en busca de alguna especie de la fauna yucateca para otorgárselos como premio a los últimos cuatro ex presidentes mexicanos.

La motivación de la Eva del Mayab surgió después de que Peña Nieto entregó la Orden del Águila Azteca a Jared Kushner, yerno consentido de Donald Trump, por considerar que el marido de la bella Ivanka fue factor clave para la negociación del nuevo acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá.

Con su cadencioso caminar por los pasillos del mercado, la escultural mestiza esparció su fino aroma a flores de “xc’anlol”, dejando al borde del éxtasis a los comerciantes del área de chicharronería, pescadería y zapatería, quienes absortos sólo contemplaban boquiabiertos el paso de la Eva del Mayab.

La “t’int’inkí” hembra maya por fin la llegó a la sección donde se comercia la fauna exótica para encontrarse con su travieso sobrino, a quien previamente le había avisado vía whatsapp desde su natal Chikindzonot.

—¿Tía Juanita, trajiste tu sabucán para llevar las especies que comprarás?

—Me canso ganso, sobrino.

—Tía, estás pirateando la frase de AMLO.

—Ya está de moda, sobrino.

—Mientras no se quede de moda entregarle máximos reconocimientos a extranjeros sólo por lambisconear, como lo hizo Peña Nieto, todo está bien tía.

—Olvídate de eso sobrino. Yo voy a implantar una nueva moda y a partir de ahora entregaré premios especiales a los ex presidentes de México.

—¿Le entregarás a Fox algo parecido al Águila Azteca?

—No “mejenkisín”, Chente se hizo acreedor a la “Chachalaca parlanchina”.

—“Uay”, tía, eres sabia, va con su personalidad.

—Además, sobrino, acuérdate que así lo había bautizado ya sabes quién.

-¿Y a Salinas, que reconocimiento le darás?

—“El Águila Calva”.

—“Maare”, tía, le atinaste.

—Sobrino, a Peña le tengo una sorpresita.

—¿Una gaviota?

—No “mejenkisín”. Le daré “El carpintero copetón”.

—¿Y a Calderón, tía?

—Un premio especial. No será un ave.

—¿Un pomo?

— Casi, casi “¡Xtabentún 18!”

—¿Reserva 18 años?

—Te lo dejo de tarea, sobrino.

—¡Tía, eres grande, muy grande!

—¿Como el avión presidencial que ya está en venta?

—¡Más grande, tía!

—¿Como el interés de los diputados por trabajar muchas horas?

—“Jelé”, tía, acuérdate que ayer se suspendió la sesión de dos Comisiones en el Congreso local por la inasistencia de varios diputados.

—“Uay” sobrino, y eso que ganan más de 80 mil pesos al mes.

—Tía, los que sí desquitan su sueldo son los regidores del Ayuntamiento de Mérida.

—Sí, cómo no, particularmente la ex panista Sofía Castro y el priísta Richar Mut Tun, quienes votaron a favor de la propuesta del PAN para que se mantengan sus privilegios en gastos y servicios médicos y de laboratorio privados.

Agotados los temas a abordar, como dirían los esforzados representantes populares en el Congreso y en el Ayuntamiento, el generoso sobrino cabeza de “lec” invitó a su amada pariente para trasladarse al puesto de comida más cercano para saborear media docena de dietéticos taquitos de cochinita pibil.

Cuando la tía Juana le preguntó si traía dinero para invitarla, ya que siempre resulta que olvida su cartera a la hora de pedir la cuenta, ni tardo ni perezoso el sobrinín le respondió: “Me canso ganso”.