En esta temporada 2019-2010, el precio de los filetes de mero rojo y negrillo estará a la par que el precio de un kilogramo de cola de langosta, con lo que se alejará de los bolsillos locales.
POR ESTO! publicó en la edición del martes que los industriales pesqueros vislumbran que el arranque de temporada del mero, que comienza el próximo lunes 1 de abril, abrirá con un precio de 280 pesos por kilo en el rojo (aunque la temporada pasada cerró más bajo que el negrillo) y 220 pesos en el negrillo, debido a la demanda en EE.UU. por vacacionistas y los “springbrakers”.
De acuerdo con información de los propios industriales, por cada kilogramo de mero rojo o negrillo entero se logra en promedio medio kilo de filetes, es decir, que se requieren 2 kilos de mero entero para lograr un kilo de filetes limpios, lo cual traduce que el kilogramo de filetes de mero rojo costaría 560 pesos y de negrillo 440 pesos, un precio cercano al kilo de cola langosta, que cerró temporada 2018-2019 en 540 pesos en Oriente y 570 pesos en el Poniente.
POR ESTO! ha publicado que la pesquería del mero en las embarcaciones mayores es para la exportación, principalmente hacia Estados Unidos, y la pesca ribereña captura otras especies englobadas como mero o de tallas más bajas, que son las que abastecen al mercado local.
Se ha informado que hay lanchas ribereñas que se dedican al mero y navegan más allá de la costa para lograr ejemplares de mayor tamaño, ya que son de estos grandes tamaños de donde se obtiene los filetes de mero, que para la exportación son empaquetados al alto vacío.
El precio del mero cada temporada va al alza, ya que las capturas son menores y la demanda en EE.UU. es mayor; sin embargo, estos altos precios también impactan en los meros ribereños o las otras pesquerías de escama que son las que abastecen al mercado local, ya que elevan su precio.
Impacto social
POR ESTO! informó el martes que serán los pescadores ribereños los que abastecerán la demanda de la Semana Santa.
El mero es la pesquería más importante del Estado por su impacto social, ya que al abrirse cada temporada del 1 de abril al 31 de enero del siguiente año, los pescadores ribereños pueden salir a la captura con artes de pesca del mero como es el palandre y eso les permite capturar otras especies.
Para los pescadores de mediana altura, esta pesquería significa el trabajo continuo en el año y viajes de 20 a 25 días.
Los preparativos para comenzar la temporada son visibles en la costa a fin de que, desde el lunes 1 de abril, salgan a la mar. Y este año el precio es un factor atrayente.
(Verónica Martínez)