PROGRESO, Yucatán, 20 de abril.- Para la marcha de la fe y el rosario de pésame, en la parroquia de la Purísima Concepción y San José, después de la procesión hacia la sede, se instaló el santo sepulcro, para llevar a cabo el rosario de pésame.
El Obispo Auxiliar, Mons. Pedro Sergio de Jesús Mena Díaz, acompañado de los presbíteros Oscar Manuel Cetina Vega y Aarón Esteban Sánchez Bobadilla, párroco y vicario de la Purísima Concepción y San José, respectivamente.
Partieron del campo Miguel Hidalgo y Costilla sólo varones y mujeres de la Capilla de Guadalupe; en el caso de los hombres llevaban la imagen de Jesús en el sepulcro y las mujeres la imagen de la Virgen María.
El continente varonil avanzó de oriente a poniente y el femenil de poniente a oriente, para encontrarse en el parque de la Independencia, donde se juntaron para bordear el parque y llegar a la parroquia de Progreso, y continuar la celebración relacionada con el Viernes Santo por la noche.
En esta reflexión espiritual sobre la Semana Santa, en la parroquia de la Purísima Concepción y San José, de esta ciudad y puerto de Progreso, Mons. Pedro Sergio de Jesús Mena Díaz, en su mensaje dijo que hay que admirar a la Virgen María debido a que tanto hombres como mujeres rezaron el rosario para comprender los dolores de la Virgen María, no sólo acompañarla en su dolor, sino aprender de ella.
La vemos dolorosa, pero fuerte con todo su sentido en la esperanza de Dios; es un ejemplo para muchos hombres y mujeres. Durante la semana en la Pasión de Cristo no vemos a la Virgen María esperando ver en el sepulcro la resurrección de su hijo, debido que como madre siempre estuvo segura de la resurrección de Jesús, su hijo amado.
En este puerto, centenares de Fen medio de respeto y dolor ante la muerte de Jesús en el Viernes Santo, con toda solemnidad participaron en la Marcha de la Fe, y del Rosario de Pésame.
Ambos contingentes entraron al templo parroquial, donde después del mensaje del Mons. Mena Díaz, se procedió a rezar el rosario, en un intenso recordatorio de la muerte de Jesús en la cruz.
(Julio Jiménez Mendoza)