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Yucatán

Inicia el debate por 4ª. T y la transparencia en el sector pesquero

Jesús Solís Alpuche “Enredo” o mafias monopólicas

El 26 de abril, en el Salón de Actos “Heberto Castillo Martínez” de la Cámara de Diputados, dentro del marco del Primer Encuentro de Productores rumbo a una Ley de Fomento Agropecuario, con miras a la integración de la Unión Nacional de Productores de Alimentos, el Barzonista Faustino Manuel López Fernández, presidente de la Cooperativa “Mar y Tierra Brava de Dzilam”, con más de 5 años de su constitución sin poder acceder a un permiso pesquero, hizo en tribuna una serie de señalamientos respecto al monopolio y mafias de los permisos pesqueros y la depredación que resulta de este sistema de extracción de los recursos del mar que no beneficia a la comunidad de verdaderos productores de Dzilam Bravo, porque estos permisos están en poder de especuladores.

En una entrevista que le hice posterior al evento en Ciudad de México, amplió el panorama de la urgente necesidad que el proyecto de la 4ª. Transformación en Yucatán ponga atención en la defensa de los recursos marítimos que son depredados con la pesca de arpón y la clonación de matrículas en temporada del pulpo y pepino de mar, cuando los empresarios dan arribo y permisión a pescadores de otros puertos y otros Estados, explotando con exceso los recursos del patrimonio marítimo regional de Dzilam Bravo.

Dado el impacto que ha causado la información que generó su participación en el Encuentro de Productores, y la expectativa de un proyecto para recuperar la soberanía alimentaria del país, que incluya un regulado sistema de producción pesquero que beneficie a los verdaderos productores con permisos, para romper el monopolio actual en manos de los armadores y comercializadores que en los últimos 30 años han explotado la pesca sin ninguna consideración.

De entrada, la reflexión de López Fernández es de preocupante impacto: dice que Dzilam, como puerto, no tiene otro futuro económico más que el pesquero. “Dzilam no cuenta con posibilidades turísticas de generación económica fácil, como otros puertos y poblaciones del Estado de Yucatán”. De manera que, “si no nos organizamos, si no abrimos los ojos como puerto pesquero que cuide el futuro de sus reservas, muy pronto tendremos que emigrar en busca de otras oportunidades de trabajo”, dice.

Expone que las autoridades que hasta ahora administran el sistema pesquero en forma neoliberal, privilegiaron con los permisos a los llamados “armadores”, y estos mismos permisos, que hasta ahora nos niegan como cooperativa, les permite obtener apoyos crediticios y dinero público, es decir dinero del pueblo, dinero nuestro, que los gobiernos administran y sólo se les da a quienes el mismo gobierno ha favorecido con los permisos.

-Quienes son privilegiados con estos permisos de pesca pueden justificar el arribo de los productos del mar, les permite la facturación y la comercialización del producto, mientras a los que nos han negado la permisión somos tratados como pescadores furtivos.

-Este sistema de injusticia y privilegios entre los neoliberales tiene que cambiar en la 4ª.T. Y aunque el mismo presidente Andrés Manuel ha dicho que el sistema es un “elefante reumático”, los pescadores de Dzilam Bravo tenemos que organizarnos para empujarlo y salir adelante con los cambios propuestos por el gobierno federal, asegura.

-Sabemos que, el proyecto de la 4ª.T es incluyente y muchos empresarios y quienes se han beneficiado por el neoliberalismo del viejo sistema van a tratar de montarse en el proyecto del nuevo gobierno. Pero no importa, nuestro principal objetivo es que se constituyan nuevas reglas, que se acaben los privilegios y los favoritismos que durante los últimos 30 años los ha beneficiado, excluyéndonos a los verdaderos productores del mar como personas con derechos a permisos y créditos para el trabajo pesquero.

-Urge una verdadera regeneración en la forma de otorgar los permisos. Hoy la mayoría de éstos se encuentran en manos de industriales y comercializadores que no son pescadores. Estos, también llamados armadores, traen gente de otros puertos donde han depredado el recurso, y de otros Estados, (en la última temporada hubo más de 2,500 foráneos), a nuestro territorio marítimo, incluso con matrículas clonadas en sus embarcaciones, que las autoridades marítimas permiten. A estos pescadores foráneos se les paga menor precio por la pesca, al mismo tiempo que la explotación del recurso se excede.

López Fernández dice que tiene fe en la 4ª.T para que cambien las reglas de juego de la explotación pesquera en Dzilam Bravo y todo el Estado y está dispuesto a empujar, organizadamente, en conjunto con todos los pescadores que sufren la misma discriminación en los permisos para que se democratice los derechos a la explotación y comercialización de los recursos pesqueros, que deben llegar al pueblo en forma económica para mejorar su alimentación.

Dice que hay más de 900 permisos, los que deben distribuirse de manera equitativa entre los verdaderos pescadores y cooperativistas, en lugar de mantenerlos en manos de membretes fantasmas.

Subraya que su propuesta es de cambios verdaderos y no maquillados, ya que si siguen los mismos lineamientos del sistema neoliberal prevalecerán las mafias y los monopolios, sólo que ahora los enfrentaremos organizadamente, siguiendo la consigna del presidente López Obrador, de combate a la corrupción, al oportunismo y a la simulación. Concluye. chantzacan@hotmail.com

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