Eliseo Martín Burgos
El principal arquitecto catalán, Antonio Gaudí, cuando estaba remozando la Catedral de Palma de Mallorca, supo que su obra no era del gusto del Clero y les preguntó en qué no estaban de acuerdo. Uno de los curas le dijo:
–Mire, don Antonio, lo que usted hace parece un tranvía y un tranvía no parece digno.
–Pues aunque los tranvías no les gusten, los tranvías son hermosos.
Como ironía del destino, el más grande arquitecto del modernismo murió atropellado por un tranvía.
Antología del Chascarrillo
Segunda Epoca}