El día de hoy el gobernador de Yucatán, Mauricio Vila, entabló un peculiar diálogo con ciudadanos “preocupados” por la Ley Seca.
En la publicación se le solicitó a Mauricio Vila que se levantara momentáneamente la ley para que los ciudadanos pudieran acceder a la venta de bebidas alcohólicas y reabastecerse así de “kawamitas”.
El gobernador yucateco argumentó que la esencia de dicha prohibición consiste en disminuir la violencia intrafamiliar que sufren mayormente las mujeres y los niños. Les solicitó calma y que recordaran que la prioridad en este momento es la salud.
Múltiples sectores de la sociedad han cuestionado dicha prohibición pues argumentan que las personas que padecen alcoholismo se volverán más violentas a causa del síndrome de la abstinencia, como mencionó la activista Adelaida Salas Salazar, representante del Observatorio Ciudadano del Feminicidio en Yucatán.
Por Redacción Digital Por Esto!
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