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Yucatán

Habitantes de Chikindzonot, Yucatán, sin siembra, trabajo o alimento

Chikindzonot atraviesa una severa crisis de desempleo debido a que la cuarta parte de su población que laboraba en Cancún fue despedida como consecuencia de la pandemia del COVID-19 y hasta ahora no se ha podido reincorporar a alguna actividad productiva.

Aunado a esta situación, el paso de la tormenta tropical “Cristóbal” dañó una gran parte de la reserva de maíz que los campesinos guardaban en sus “najil-nal” (trojes) ubicados en sus parcelas y que les servían de alimento y de semillas para nuevas siembras.

En visita a este municipio 100 por ciento milpero, ubicado en el Sureste del Estado, a 170 kilómetros de Mérida, los reporteros de POR ESTO! recorrieron la parcela del comisario ejidal Brígido Poot Moo para constatar las afectaciones que sufrieron las mazorcas de maíz como consecuencia de la intensa lluvia que cayó hace dos semanas.

Comienza la siembra

En cuanto a plantaciones del grano prácticamente no hubo ningún daño debido a que precisamente la siembra inicia en junio y sólo algunos campesinos habían empezado a cultivar algunas superficies cuando llegó el fenómeno meteorológico.

La autoridad ejidal apuntó que la mayoría de las siembras comenzaron apenas la semana pasada cuando cesaron las intensas lluvias; en su caso, mostró las plantitas que apenas germinaban a tres días de haber depositado las semillas en la tierra.

Agregó que si todo marcha bien y las condiciones climáticas son las adecuadas, en diciembre empezarán las cosechas.

Como lo han hecho desde siempre, siguiendo la tradición y conocimientos de sus antepasados mayas, los cultivos de maíz se intercalan con calabaza y frijol.

Macal con miel

Don Brígido también siembra en su milpa macal, una planta cuyo tubérculo se sancocha y se come con miel como postre en la comida “o como una botana mientras descansas o conversas con la familia”, aseveró el comisario.

Dijo que ha escuchado de sus abuelos que en épocas de sequía cuando no se podía cosechar maíz el macal servía como masa para sustituir al grano y así sobrevivir ante períodos de escases.

Al retomar el caso de los daños causados a las reservas de granos que guardaban en los trojes, señaló que urge que las autoridades apoyen a todos los milperos con maíz para comer y para semillas, así como también con fertilizantes para las nuevas siembras y fungicidas para atacar las plagas que aumentarán por la humedad generada por la gran volumen de agua que se acumuló en los suelos.

Resaltó que un problema actual que experimenta Chikindzonot es el desempleo de unas mil personas, que trabajaban en Cancún y Playa del Carmen, pero que a causa de la contingencia sanitaria sus centros de labores cerraron y tuvieron que regresar a la población.

Se gastó el “t’alkú”

Observó que esta fuerza laboral que se quedó sin empleo laboraba en restaurantes, hoteles y demás actividades turísticas, así como en la industria de la construcción, pero al paralizarse esos sectores no sólo dejaron de enviar dinero a sus familiares, sino que regresaron a sus casas sin recursos.

Dijo que si bien al ser el municipio 100 por ciento milpero y obtener los alimentos del campo pudiera parecer que el cierre de empresas no les afectaría, la realidad es diferente debido a que quienes regresaron de Quintana Roo tienen que comer ahora de la mesa y platos de sus familiares.

En ese sentido, expuso que muchos hogares han tenido que sostener a sus familiares desempleados durante estos tres meses y si bien tenían algunos ahorros o un “t’alkú”, ya se les gastó y ahora padecen dificultades económicas.

Para colmo dijo que la tormenta tropical dañó las reservas de alimentos resguardados en los “najil-nal”, lo que viene a complicar la difícil situación que enfrentan los habitantes de Chikindzonot.

La estructura del “najil-nal” “El najil- nal” (casa del elote, en maya) es una estructura de bajareques con techo de huano y dimensiones de dos metros de ancho, dos y medio de largo y dos de altura. Se construye asimismo una cama de madera a 20 centímetros de altura de la tierra donde se estiban las mazorcas en forma piramidal.

La altura de 20 centímetros es para evitar inundaciones, pero la inmensa cantidad de agua que cayó superó un metro de altura y dañó toda la reserva del grano.

Sobre el caso del coronavirus, en el municipio se han contabilizado 12, pero desde hace varias semanas se frenaron y no se ha registrado ningún caso más hasta ahora.

Consideró que al principio, muchos de los habitantes no creían que realmente la enfermedad existiera y que llegaría a la comunidad, pero luego de que las autoridades de Salud dieron a conocer los primeros casos la gente tomó en serio el asunto y comenzaron a fortalecer las medidas de prevención, como hasta ahora.

A su vez, las autoridades municipales han dispuesto medidas sanitarias en los espacios públicos en concordancia con los dictados del gobierno estatal y federal, como limitaciones de eventos públicos y masivos, así como las disposiciones esenciales de quedarse en casa, lavarse las manos frecuentemente y usar el cubrebocas.

En la población se venera a dos santos: la Virgen de la Candelaria (del 20 al 29 de abril), patrona de las artesanas, y San Isidro Labrador (del 7 al 15 de mayo), patrono de los campesinos.

Este año le correspondía los festejos a la Virgen de la Candelaria, pero por la contingencia sanitaria se pospuso para el 2021, mientras que para San Isidro Labrador se correrá hasta el 2022, ya que las festividades se alternan año a año.

Con información de Rafael Mis CobáPor Redacción Digital Por Esto!  

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